Título: “El valle del asombro”
Autora: Amy Tan
Traductora: Claudia Conde
Editorial: Planeta
Edición de tapa dura con sobrecubierta
Fecha de publicación: 18 de febrero de 2014
Páginas: 688
Algunos sitios de internet tenían entre sus recomendaciones de fin de año el libroEl Valle del Asombro, recordé que lo tenía en casa, como una promesa futura a leer. Sin embargo, debo confesar que tengo otros libros iniciados que no he logrado concluir, aun así eche una hojeada rápida a libro para ver que tal pintaban las primeras páginas, para mi sorpresa no pude detenerme unos cuantos días bastaron para terminar la obra completa.
El motivo, encontré una lectura ágil, que se lee y disfruta sin tomar en cuenta el tiempo que llevas en ello. El libro nos remite a las mujeres cortesanas de los principios del siglo XX en Shanghái. La narrativa inicia describiendo una casa de cortesanas de primer nivel llamada “Oculta Ruta de Jade”, en la cual, realmente te sientes dentro de sus paredes observando los cuadros, floreros, tapetes, aromas, colores, y por supuesto sus clientes y las enigmáticas cortesanas chinas, es como si un mundo nuevo se abriera ante el lector con una promesa implícita, la de acerté participe de todos los acontecimientos, secretos, promesas, risas y tristezas que parecerán sus protagonistas, lo cual en su momento pensé sería difícil de lograr.
La Oculta Ruta de Jade, es administrada por una mujer estadounidense que se hace llamar Lulú, donde todo lo que respecta a ella, te atrae por su personalidad mística, velada por secretos, sentimientos contenidos, audacia para los negocios, amabilidad, elegancia y grandes dotes de anfitriona, así la historia avanza narrada principalmente desde la perspectiva de Violeta, la pequeña hija de Lulú.
Somos testigos de los sentimientos que la pequeña proclama en busca del amor materno, de la identidad propia y del deseo de conocer a ciencia cierta su origen, todo ello enmarcado en el mítico escenario de la ciudad de Shanghái y de sus cortesanas, donde nos enteramos de sus confabulaciones, de sus historias eróticas, así como chuscas y tristes por igual.
Conforme la trama avanza, el mundo de Violeta cambia, debido a acontecimientos desdichados de los cuales es difícil mantenerse en pie, donde nuestra protagonista sale bien librada gracias a su tenacidad y a su personalidad inquebrantable ante la adversidad, así pues, como ella misma se describe nos encontramos ante «una niña americana en un traje marinero, una cortesana virgen con chaqueta de seda de cuello alto, una viuda estadounidense con la cara bañada en lágrimas, una esposa china con un ojo morado»…Un centenar de versiones de una sola mujer a lo largo de los años.
En estos episodios, es cuando en mi percepción personal;el libro aporta algo sorprendente, la tenacidad de algunas mujeres para luchar en un mundo patriarcal, cimentado en costumbres y tradiciones que afectaron gravemente a la mujer, con una desventaja descomunal que transgrede las relaciones familiares; que hiere en lo más profundo de los corazones de hombres y mujeres; errores pasados que se siguen cometiendo en el presente, como un circulo difícil de romper.
Los sentimientos del lector están inmersos en la lectura, navegan entre cartas que se envían los personajes de este libro a través de los años, como un ejercicio de autorreflexión como bien relata Violeta «Mi madre había dicho…lo que sentía al escribir esas cartas. Las comparaba con los pasillos de una casa, que partían de extremos opuestos y que al principio se recorrían con una inquietud para después sentir la maravilla de encontrarnos juntas en una habitación que siempre ha existido». Una sensación grata, que como lector agradeces.
Asílos personajes del valle del asombro son entrañables, se delinean muy bien. Por momentos pareciera, que los personajes secundarios se roban el estrellato y lucen con diálogos inteligentes y divertidos, que minimizan la tensión gracias a su sentido común y humor negro.
Amy Tan nos presenta así pues, voces femeninas, dando batalla desde su trinchera a través de tres generaciones. Detallando relaciones de madres e hijas, donde «la indiferencia es una asesina insidiosa del corazón y el descuido es su cómplice»donde los lazos sinceros parecieran desvanecerse por cosas que se dijeron o se dejaron de decir.Todo ello en voz de mujeres fieles así mismas. Mujeres que viven en mares profundos y convergen a veces con hombres que flotan en la superficie.
ACERCA DE LA AUTORA:
Amy Tan
Amy Tan es autora de siete novelas, entre las que destacan El club de la buena estrella, La hija del curandero y Un lugar llamado nada. Sus obras han sido traducidas a treinta y seis idiomas. Vive entre San Francisco y Nueva York.Vídeos Relevantes de Amy Tan:
Entrevista a Amy Tan, El valle del asombro