La Costa Blanca es el nombre turístico dado a la costa del Mediterráneo situada en el sureste de España, provincia de Alicante(España), que comprende desde el municipio de Denia hasta el de Pilar de la Horadada. Está constituida por 244 km de playas mediterráneas, calas y acantilados.
Elche, con su Palmeral y su Misteri, ambos patrimonio de la humanidad. Alcoy y Novelda, modernistas. Alicante, saludando al mar desde la Explanada. Benidorm, desafiando al horizonte con su mítico skyline. Orihuela, envuelta en el eco hernandiano y en la majestuosidad de su arte sacro. Y así hasta completar un catálogo inagotable de experiencias urbanas, contrapunto del descanso en la arena o de los placeres de la montaña.
Son más de 170 playas y calas las que dan la bienvenida al visitante que puede disfrutar de más de 300 días de sol al año. Con arena fina, de cantos rodados, escondidas tras las dunas, al borde de pinadas, bajo abruptos acantilados, urbanas, recónditas, de aguas tranquilas o encrespadas por el viento.
El viernes por la tarde nos vamos de turismo por Altea
Lo primero será dar una vuelta por el Casco Antiguo. Hay muchas Alteas en Altea. Está la Altea marinera hasta el puerto, la Altea de la huerta que mira hacia dentro, la Altea de las postales con su característica cúpula azul y sus casas blancas del casco antiguo. Altea la Vella a las faldas de la Sierra de Bernia, la olla de Altea y su isla, y el centro de Altea con su zona comercial.
Pasea, callejea, visita las tiendas de artesanía y siéntate en una de sus terrazas junto a la Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, el principal símbolo de Altea, con sus dos cúpulas de tejas azules y conocida como “La Cúpula del Mediterráneo”.
Y, por último, ascenderemos al mirador Cronistas de España. En Altea, a este mirador también se le conoce como “el mirador de la Plaza de la Iglesia”, y es el punto de todo el casco antiguo desde el que mejor se puede ver la Bahía de Altea.
El sábado por la mañana vamos a la playas de Orihuela
Primero iremos a la playa Barranco Rubio, cuya extensión es de 655 metros. Se trata de una playa urbana sin paseo marítimo, galardonada con bandera azul y principalmente compuesta por arena dorada. Además, cuenta con unas aguas muy tranquilas para poder disfrutar en familia.
La Cala Capitán es de pequeñas dimensiones y da servicio a los numerosos chalés y apartamentos existentes al abrigo de las urbanizaciones de Cabo Roig y La Zenia. Se trata de una cala de suave y fina arena, excelente para la práctica del buceo, perfectamente equipada, y que forma parte de la atractiva fachada marítima de Orihuela, una suma de recoletas calas, playas de arena dorada, cuidadas urbanizaciones y dos recogidos puertos deportivos.
El sábado por la tarde volvemos a Altea para hacer buceo
Saliéndonos un poco del típico plan de playa, ahora nos animamos a bucear.
El Mediterráneo permite disfrutar de sus aguas en la superficie y también en sus fondos, algunos de ellos protegidos, como el caso de la Reserva Marina de Tabarca y la Reserva Natural del Cabo de San Antonio, entre Dénia y Jávea. Para los submarinistas hay rincones paradisiacos de flora y fauna marina.
Sin duda, varias de las inmersiones que se realizan en esta zona, tales como la Cueva del Elefante, la Isla Mediana o Mitjana, la Llosa y la Isla de Benidorm están consideradas como las mejores de ésta parte del Mediterráneo, siendo cientos lo buceadores que cada año disfrutan de ellas y de sus impresionantes fondos marinos.
El domingo por la mañana nos vamos a Elche
Un oasis. Eso es Elche. En el Mediterráneo, pero también en medio del tráfago cotidiano. Un lugar para perderse. Y encontrarse. Con todo lo necesario para desconectar. Y lo imprescindible para disfrutar a tope de cuanto requieran nuestro sentidos.
Hay tantos atractivos, que resulta difícil por dónde empezar. El palmeral. Ése puede ser un buen comienzo. Patrimonio de la Humanidad desde el año 2000, más de 200.000 ejemplares envuelven la vida cotidiana de los ilicitanos. Y de cuantos nos visitan.
El campo vivo (el Camp d’Elx) que abraza amorosamente la ciudad, sus productos agrícolas exquisitos y saludables, los nueve kilómetros de costa casi virgen, las compras (el calzado, producto estrella) convertidas en verdadero festival de precios y calidad, el turismo activo en sus parques naturales, playas y humedales.
Terminaremos el fin de semana en la playa Arenales del Sol, con casi tres kilómetros de arena fina y blanca, esta playa es una de las más valoradas de la costa alicantina, tanto por la calidad de sus aguas como por la riqueza de sus fondos marinos, así como por sus dunas embrionarias, móviles, semifijas, fijas e incluso fósiles. Además, está conectada con el paraje natural del Clot de Galvany, un humedal situado entre las zonas urbanas de Arenales del Sol y Gran Alacant (en el término municipal de Santa Pola).