Luego de dar a conocer que es fiel seguidora de nuestra web www.recorriendoconsalvasor.com le pedimos que nos hablara sobre su experiencia de viaje y a qui esta su escrito disfrútenlo.Nacida y criada en la Rep. Dom. La idea de playas y hoteles todo incluido no es mi primera opción de vacaciones si estoy fuera de mi país, es por eso que cuando supe que visitaría Cabo San Lucas no era que brincaba de alegría exactamente. Pero, mi percepción estaba a punto de cambiar.
Luego de 4 horas y media de vuelo, el piloto por fin anuncia que nos estamos preparando para aterrizar, miro por la ventana y ahí está, la baja california sur, pedazo del mundo donde se alberga San José del Cabo y su hermano turístico, Cabo San Lucas.
En un paisaje desértico, de esos en lo que te preguntas cómo rayos encontró alguien este lugar, se encuentra uno de los destinos turístico mas famosos para los habitantes de la costa oeste de los estados unidos, no solo por sus playas o sus todo incluido, si no también por su inagotable actividad.
Mi primera aventura empezó con un día de pesca. Catalogado como unos de los “cinco mejores destinos de pesca en el mundo”, esto era algo que no podía dejar de intentar.
El día empieza como cualquier actividad que requiera disciplina, levantarse temprano para aprovechar la especie de letargo que sufren los peces cuando aun el sol no hecho su preciada aparición. Este mismo letargo que recién despierta se siente en el muelle de Cabo. Pescadores que reciben a sus clientes, que al igual que yo y mis compañeros de viaje, esperan tener la promesa que cabo ofrece como capital mundial del marlín, regresar con uno a puerto al final del día.
Yo, mas despierta que dormida, decido preparar mi día buscando que comer,encontrando en mi camino un puesto medio improvisado de tacos que en su menú ofrecía:taquito de res, de tripa, de cabeza, al pastor y de huevos al estilo mexicano. Me fui por lo seguro y probé los de huevo, y como conejito de energizercon baterías nuevas mi día empezó con buen pié.
Salimos de muelle listos para emprender la aventura hacia altamar y a la par de la salida del sol, se fue presentando de forma majestuosa el famoso arco de Cabo San Lucas.Una estructura rocosa formada en la punta de la península, llamada también “lands end” o el fin de la tierra. Alrededor de ella se mueve Cabo, y me hace pensar que es la responsable del nacimiento de esa ciudad que crece con forma de hoteles y ofertas de lujosa vida que viene en un paquete de time share.
Al ser un lugar casi en medio de la nada, sus habitantes procuran que encuentres formas de divertirte y la verdad es que lo logran, con una oferta vasta de cosas para hacer durante el día, desde pesca hasta skydiving, no hay manera de encontrar el aburrimiento en Cabo. Pero la cosa no para ahí, la vida nocturna de Cabo tiene la misma intensidad que sus actividades diurnas.
Las calles del pueblo, que durante el día bostezan ya que casi todo el mundo está en el agua, de noche prende sus luces e invita a los visitantes a no dormir, no mientras estés ahí. Bares, restaurantes, cantinas, mezcalerías, conciertos, hay de todo y para todos los gustos. El caso es que no puedo decir que de noche no hay actividad en Cabo San Lucas, porque la hay, y mucha! Cabo Wabo, Mandala, Giggling Marlin, eran algunas de las opciones que se repetían cuando preguntaba qué lugares están “in” en Cabo.
Con el fin de las vacaciones a la vuelta de la esquina, me atreví a explorar este lugar como local; la recomendación me llevó a San José del Cabo. Una encantadora ciudad colonial con estrechas calles empedradas, y un encanto tan particular que me hizo llenar la memoria de la cámara tomándole fotos.
El centro de San José del Cabo tiene como figura principal la iglesia, fundada por padres Franciscanos por ahí por el 1734. Un punto de partida para empezar a caminar y perderse en la historia que este mágico y tranquilo lugar puede ofrecer.
Galerías de arte, artesanías locales con sus creadores trabajando dentro de lasmismas, gift shops, hoteles con hermosos patios interiores y claro, restaurantes.
La oferta es tan variada que nos tomó un rato ponernos de acuerdo donde comer. La decisión fue acertada,probando en el lugar escogido autentica comida mexicana, donde no podían faltar unoschapulines acompañados de las salsas mas picantes que mi paladar podía imaginar.
No podía irme sin probar a México desde su producto mas famoso, el tequila. Así que antes de empacar salí a buscar una de las innumerables tiendas que ofrecen degustación gratuita y toda las respuestas a las preguntas que puedas tener sobre este elixir de dioses.
Dije adiós a Los Cabos con un suvenir en mano de la mejor tequila que haya probado, la experiencia de una semana inolvidable y una nota a mi misma:tener siempre alerta los sentidos para lograr que cada experiencia se convierta en algo digno de contar y no juzgar ningún lugar sin antes visitar.