Llegamos a Miami de noche, lloviendo y con unos truenos de asustar. Vamos a recoger el coche y nos entregan un modelo que nos obligaría a llevar las maletas colgadas por la ventana, es más el bolso de mano en el maletero y sin poder cerrar. Reclamamos lógicamente y tras ser consciente que una oferta nos cegó y no visualizamos todos los detalles, el empleado (un ángel) nos hizo un arreglito ajustado y salimos con un Chevrolet Impala impresionantemente grande y donde nuestras maletas van bailando en el maletero.
Tras todos estos sucedidos que nos generó un poco de nerviosismo (si nos atenemos a la verdad estábamos histéricas), concluimos que a partir de ese momento no quedaba otra de reafirmarse en que todo tenía que ir a mejor, es decir hacia arriba y así lo hicimos, salimos del aeropuerto nosotras, el Impala, la tormenta con sus rayos y truenos y en dirección norte llegamos a Fort Lauderdale y nos alojamos en el motel 6.
A la mañana todo seguía en su sitio, excepto la tormenta que con nuestra actitud positiva hemos conseguido que se aleje.
De momento nos hemos saltado Miami porque para empezar es muy "intenso", a la vuelta que nos encontraremos más avezadas en la "american life" lo intentamos.
Fort Lauderdale es la Venecia que tienen los americanos, con falta de góndolas pero con unos yates que juegan a ser trasatlánticos.
Para hacerse una idea de la fisonomía de la ciudad es un buen plan cogerse un " water taxi" que te pasea por diferentes canales y te permite salir en diferentes paradas para poder visitar los sitios más interesantes: Bonnet House, Museum of Art Fort Lauderdale, Stranahan House, ... luego vuelves a la parada y como los barquitos están todo el día dando vueltas vuelves a montar y sigues.
Destacable las mansiones que hay a la orilla de los canales, con sus yates esperando en la puerta y al otro lado por si te surge la necesidad de transportarte sobre ruedas unos coches de gama descomunal y ante esta situación de las cosas siempre la misma pregunta, pero ¿dónde trabaja esta gente?... ahí lo dejamos.
Paseamos por Las Olas Boulevard, una zona bulliciosa, con un montón de restaurantes cafés y tiendas un buen paseo al mediodía o al caer la tarde y se va cogiendo el pulso de la ciudad.
Uno muy recomendable si os apetece un buen plato italiano el Café Europa y además con una amplia carta de postres donde se pueden degustar unas tartas impresionantes.
Al final del Boulevard se encuentra la playa y ahí está el Café Casablanca, con sugestivo nombre y muy buen ambiente.
Sin embargo como llega el capítulo gastronómico yo os propongo otra opción no menos interesante, el supermercado Winn/Dixie con unas frutas y verduras maravillosas, pollo frito o pescado, preparados de gambas y cangrejos recién cocidos.
Luego al coche hasta la playa, unas buenas bebidas bien frías y .... siesta y a seguir viaje.
Una curiosidad de esta ciudad es que es uno de los vértices del famoso triángulo de las Bermudas, junto con Puerto Rico y Bermudas. El famoso vuelo 19 en el que desaparecieron 5 aviones salió de aquí y nunca se les volvió a ver.
Hoy ha sido la primera etapa y damos el día por finalizado.
Hemos completado el "kit de la I95″ que se compone de: 1 nevera que ha resultado ser de poliespan, que nos permitirá mantener las bebidas, la fruta, las verduras, los yogures y la comida en general bien fresquitos. Con este sistema, mantenemos a lo largo del viaje una dieta bastante equilibrada y evitamos en todo lo posible la "facilidad" que hay en estos viajes de abusar de la "fast food". Todas las mañanas cargamos la nevera de hielo en los moteles (gratis) o en todas las gasolineras en las que venden bolsas desde 10 kg.
Jarra termo, aquí no eres nadie sin llenar el depósito de buen café americano en cualquier gasolinera o en el del café que te cruces.
También somos de la opinión que en estos viajes de lanzarse a la carretera no es buena idea llevar los alojamientos concertados, lo único que se consigue es ir encorsetado todo el viaje.
Nuestra modalidad es a "eso de media tarde", buscar en internet moteles, hoteles, ...y a la distancia, precio y características que interese, siempre te está esperando una buena oferta.
Os había dicho que es necesario un GPS?, imprescindible y además con él te puede solucionar los momentos que necesitas wifi, buscas en establecimientos de comida rápida y siempre hay un Macdonalds cerca con wifi gratis y sin contraseña, también el Starbucks, ...
Bueno ahora toca fotos y hasta mañana que visitaremos Boca Ratón, Delray Beach y Palm Beach que serán nuestra 2ª etapa.
Seguimos en el I95, nos vemos.