En mi infancia no teníamos esos electrodomésticos tan modernos. En verano recuerdo a mi madre ir al río a lavar con otras vecinas tenía una tabla de madera pero usaba una piedra lisa. Todas las vecinas tenían su piedra y su puesto. Éramos felices!! Mis hermanos y yo, nos metíamos en el agua y nos pasábamos toda la mañana jugando, intentando coger mariposas y algún renacuajo. De vez en cuando lavaba algún pañuelo, pues me gustaba oír a las mujeres que mientras lavaban explicaban mil historias, pero me cansaba enseguida y volvía a jugar.
Para mi madre, hacer la colada era todo un ritual: poner en remojo la ropa blanca lavarla después con lejía, darle azulete, enjuagarla y por último tenderla al sol.
Así pasábamos toda una mañana.
Entonces, los ríos estaban limpios y el agua era cristalina. Tengo añoranza de aquellos tiempos será porqué mi madre ya no está.
Lavandera
A la ropa, ropa lavodel señor y de la amitala mojo en agua del ríoy la saco bien limpitaPara tener la ropita de primera désela a esta negritaque es la mejor lavandera.
Lava que lava, esta morenaen la orillita del ríolava la ropa contenta¡la libertad ha nacido!.
Voy caminando al ríopara lavar su ropitaverá linda señoracomo queda blanquita.