Nadie abre los ojos pensando que ese día tendrá que enfrentarse al fin del mundo. Pero, a medida que los pacientes se agolpan en la sala de urgencias del hospital en el que trabaja, Scarlet debe comenzar a aceptar que la plaga europea sobre la que las noticias venían informando ha llegado a Estados Unidos y que, a partir de ese viernes, ya nada será igual. Es lo mismo que descubre Nathan mientras corre con su hija pequeña por unas calles donde cualquier esquina puede esconder el mordisco que conduzca a una muerte agónica. Y lo que constata Miranda en su huida por carretera camino del refugio donde todos ellos habrán de coincidir: Red Hill.
Gracias a Ediciones Urano por el ejemplar.
Soy una fan de los zombies. Hace un tiempo me generaban pavor (no el bicho en sí, sino todo lo que significa un apocalipsis zombie, convertirse en uno y, más que nada, la posibilidad de que tus conocidos o familiares se conviertan...), pero cuando este año tuve una semana seguida de la misma pesadilla de un ZA decidí hacerle frente.
Comencé viendo The Walking Dead (serie que empecé en el 2010, cuando se estrenó, pero que dejé de ver por lo muy mal que me hacía en cuanto a lo emocional) y seguí leyendo libros; ya había leído Cell de Stephen King, comencé con los cómics de TWD y seguí con Red Hill.
¿Qué me encontré? Con un libro que de zombies tiene a los bichos nomás. No hay mucho de lo que me gusta de este mundo semi-post-apocalíptico que sí encontré en otras historias, y lo cierto es que se desaprovechó muchísimo.Lo básico: a pesar de lo que dice la sinopsis, a Red Hill no llegan hasta la página 200 y algo, y no es spoiler por lo que dice la sinopsis: todos llegan. Ya desde el vamos se baja muchísimo la expectativa, porque si te están diciendo que todos los personajes principales terminan llegando, vos sabés que todo lo que está pasando es nada más un obstáculo.
Más allá del error de la sinopsis, retomo lo que decía: no llegan hasta muy avanzado el libro, y después de eso quedan poco más de 150 páginas para desarrollar toda la historia que, todos creemos, se va a desarrollar. Mientras tanto es todo acción (y no lo digo como un cumplido), muchos personajes sin importancia y poca caracterización tanto de los secundarios (lo cual es coherente, porque algunos de ellos no llegan ni a esto) como de los principales. ¿Cómo voy a forjar un vínculo con alguno de ellos si se la pasan histéricos, gritando, en un auto o yendo de un lugar al otro?
Creo que el setting es muy bueno, porque durante muchas escenas del libro es de noche y se crea ese ambiente... pero está este gran error de que casi todo sucede antes de Red Hill, antes de que se conozcan, y entonces es más una historia de cómo llegan al rancho y cómo se desenvuelven dentro de un auto en un apocalipsis zombie que una historia de supervivencia en un grupo en una casa en una colina.
También esta historia tiene un gran error y son los diferentes puntos de vista. Lo que en muchos otros libros (y con otros autores...) funciona y aporta a la historia, a esta la destruye y la hiere muchísimo. Cada vez que salta de un personaje al otro hay tanta acción diferente a la escena anterior (una escondiéndose entre la maleza para que no le disparen militares, otros escapando de una horda de zombies que quiere entrar a una iglesia, otro metiéndose en la boca del lobo con el auto...) y tanto en lo que enfocarse que, cuando se vuelve, ya se perdió el hilo. Hay tantos personajes por fuera de los principales que también eso se termina confundiendo. ¿De qué punto de vista es cada uno de ellos? ¿La señora que estaba en la iglesia es la misma que estaba en la estación del servicio, o nada que ver? ¿El tío de esta chica es el mismo que los está apuntando con un arma en ese momento o cómo es?
-No me gustan las mates -replicó.
Sonreí.
-Tampoco a mí me gustan, pero a veces tenemos que hacer cosas que no son divertidas.
Se puso meditabunda.
-Es que eso lo hacemos mucho.
Además, hablando del tema de la acción, creo que el tema de las muertes no se supo manejar: sí es cierto que, en general, en un apocalipsis zombie hay muertes en masa (y más que nada al principio de éste, que es cuando sucede esta historia) y sobre todo cuando se va en grupo, como estos personajes... pero en esta historia hay tres páginas en las que se mueren todos los personajes que deben morir, sean principales, secundarios o terciarios (¿?), mientras que en el resto del libro se mueren, más o menos, dos personajes que apenas son nombrados.
Esas muertes no tienen sentido en el momento en el que están ni la razón por la que están ahí. ¿Recuerdan la última muerte de Sinsajo, que fue totalmente innecesaria y sólo para generar algo (desde mi punto de vista, al pedo) en el lector? Bueno, acá es igual. Son dos o tres muertes que pretenden ser, si se quiere, un golpe bajo, y no se logra porque son muertes porque sí, que a esa altura y para lo que termina sucediendo después de ellas hace que sean totalmente innecesarias.
Desde que llegan a Red Hill todo se convierte en una especie de segunda temporada de TWD que, aunque es una de mis dos temporadas favoritas, no tiene sentido al estar a 150 páginas del final. No se desarrolla bien la historia ni la supervivencia.
Y ahí, llegando al final... empieza bien. Bah, no sé si bien, pero por fin llegan a Red Hill y una dice bueno, de ahora en más comienza todo lo que en realidad debería haber pasado... y no. Aún peor: hay un hecho particular, que creo que todos los que lo hayan leído sabrán cuál es, que me dejó muy "¿¿¿???", sin saber qué hacer y desconcertada porque era un momento bisagra para empezar a desarrollar la historia de otra manera, pero que se tomó como algo más y terminó dejándose de lado. Y ahí me enojé, porque aunque me pareció un hecho medio ridículo, sí se podía tener en cuenta dentro del universo de un apocalipsis zombie. But nope.
Mi veredicto final es que esta no es una historia de supervivencia en un apocalipsis zombie ni de cómo éste afecta a la gente y a las comunidades (que es básicamente de lo que trata TWD), sino sobre el amor en tiempos de zombie... y, aunque siempre agradezco poder leer todo lo que puedo leer, si hubiera sabido que se trataba de esto o quién era la autora (porque soy tan ídola que no asocié su nombre con su saga más conocida hasta no tenerlo en mis manos) no sé si lo hubiera agarrado tan entusiasmada. Comprobé que su escritura es algo chata y simplista, por lo que no estoy muy entusiasmada de volver a leerla pronto.
Un buen libro para todos aquellos que no estén metidos en la onda zombie o para los que quieran leer de relaciones amorosas y roadtrips apocalípticos... pero no para aquellos que quieran leer una historia de apocalipsis zombie como Dios manda ¿? Creo que a todos los fans de la autora les va a gustar porque se centra en los sentimientos hacia un otro de los personajes, así que si leíste su otra saga y te gustó, dale de lleno a esta.
Sino, buscate otra historia. Y ya que estamos, si es de zombies, recomendámela.
PD: esto es algo que mencioné al pasar, pero quiero resaltarlo como algo más serio, si se quiere. El libro salió en el 2013, la segunda temporada de TWD en el 2011. La segunda temporada cuenta con una casa en un campo que no tiene nada alrededor, perfecta para ver si alguien -o algo- se acerca. Cuenta con un señor viejo, su esposa (no la madre de sus hijas), y sus dos hijas (que, en Red Hill, están intentando llegar). También con un macho (Shane), un joven que siempre se ofrece a ser el chivo expiatorio de los zombies (Glenn) y etcétera. No hablo de plagio porque no creo que lo sea, ni tampoco me corresponde a mí hablar de esto. Pero, sinceramente, las cosas se leen muy similares entre esta temporada y esta historia. Sad thing.