Como he dicho, la película no solo quiere abarcar muchos generos, sino que también todo su contexto argumental se queda muy diluido por querer abarcar demasiado. Tan pronto quiere denunciar el fanatismo religioso, como las malas praxis de ciertos grupos policiales animados por el gobierno de turno. Todo a medias, sin meter de lleno el dedo en la llaga.
En cuanto a los actores, estás bastante correctos, donde destacan Michael Parks, Melissa Leo, y un estupendo John Goodman.
Lo que si que no se puede decir, es que Smith, se haya cortado un pelo, pues no son pocas las sorpresas y giros de guión, que favorecen mucho a esta mediocre película.