Ya se viene desde atrás arrastrando esta coletilla de facilitar al empleado poder tener momentos de distensión, momentos que le permitan respirar, sentirse libre de espacio de trabajo que ocupa diariamente. Primero llegó internet. Nos metíamos a escondidas para mirar el correo, la red fue avanzando facilitando el trabajo en las empresas, ya de manera más productiva con sus empleados, al igual que se empezaron a abrir nuevas vías de comunicación con otras empresas y sectores. Se empezó a entender la productividad asociada a beneficio que proporciona este medio en la escala mundial.
Igual tránsito ha padecido el móvil. Una evolución meteórica de éste aparato que se ha convertido en algo más que un simple teléfono para llamar y recibir sms. El desarrollo y la investigación en tecnología, lo ha convertido probablemente en la oficina portátil.
Las "redes sociales", arte y tecnología una vez más fusionadas para ofrecer un mundo de posibilidades tanto a usuarios, empleados y empresas. Éstas ofrecen la posibilidad de informar en el mejor y mayor escaparate que es internet, toda la potencialidad y sello de garantía de una empresa. Visto por millones de usuarios, que pueden hacer uso y disfrutar de la oferta generada, y ahora tienen la posibilidad de hacer un boca-oreja instantáneo, que corre a velocidad de vértigo, con sólo estar ser miembro en cualquier red.¿Dónde está el límite que separa a la tecnología entre juego y trabajo?. Cada vez son más las investigaciones que demuestran que la tecnología está al servicio del hombre para mejorar su calidad de vida. El trabajo está dentro de esta cadena en equipo que trata de hacer a las personas más felices con una calidad de vida razonable. Si se sigue desarrollando por este camino de la tecnología se podrá comprobar que los juegos y el trabajo tienen mucho en común.