Cuanta verdad...
Ando viendo cómo, en éstos tiempos inciertos, en los que vivir es un arte, la izquierda se va arremolinando, ante la debacle sucialista, en torno a la mejor opción para meternos definitivamente en el agujero del que nunca jamás deberemos volver a salir. El labriego Cayo Lara va escalando puestos de honor en una escalera que le lleva a los primeros puestos de la política en la que Izquierda Unida sólo estuvo cuando el Partido Comunista (obvio el de España porque es algo totalmente irracional ponerlo junto) estaba bajo el poder del Califa Anguita. Y lo va consiguiendo simplemente estándose calladito y quieto, nohaciendo nada, dejando que el señor sucialista se pelee con todos los demás mientras ellos van recogiendo, despacito, tenaz y firmemente todas las migajitas que les permitirán crecer exponencialemente en votos ante el sucialismo y quien sabe, si con el tiempo, rebasarlo por la derecha, que para hacerlo por la izquierda, ya está, y de que modo, el Partido Popular.Referendos para todo.
Y con la legitimidad que le da ese crecimiento que puede venirse abajo en cualquier momento, con esa chulería propia del comunismo que es lo más mejor del mundo mundial y que se reescribe así mismo cada veinte segundos para certificar que no hay errores en su pasado sino cosas salidas de madre muy ajenas a su ideología, sigue dando lecciones a quienes quieran escucharlas sin el temor de ser barridos de la faz de la tierra por la inmundicia mental de la que son representantes. Los amigos de la progrHez y del yo no me bajo el sueldo por mucho que los proletas de España ya no sean tales porque llevan cinco años en el paro, se dedican a dar lecciones de democracia y participación popular evocando a los sindicalistos que montaron una Huelga General, sumamente fracasada, exigiendo un referendo al Gobierno sobre los recortes que estaba llevando a cabo. Referendo que no les oimos pedir a los pijoprogres de Coco y Ojete cuando gobernaba el Bufón Mayor del Reino y se cargaba todo lo que tocaba convirtiéndolo en mierda.
Ahora, los grandes adalices del rojerío patrio se unen a la fiesta referendunística para conseguir con la movilización de la ciudadanía, tan harta de la clase politicástrica a la que ellos mismos pertenece, que Mariasnico el Corto, que por cierto tiene, por si no lo sabía Cayo, Llama y Valderas, una mayoría aplastante por el mero hecho de que el Pueblo se lo ha dado, por lo que supongo que los amigos izmierdistas buscan lograr y repetir el hecho que provocaría la Guerra Civil Española. Ya durante el mandato de la CEDA, mira tu que cosas, el Pueblo dándole el poder a la derecha durante la Segunda República, el progrerío dio muestras de su alta calidad democrática aventando toda una serie de levantamientos contra la legalidad vigente por el método de exigir lo inexigible. El pedir un referendum para deponer un gobierno legítimamente elegido en las urnas es algo tan carácteristico de aquellos que odian la democracia por encima de todo que ya ni tan siquiera debiera sorprendernos.
Referendums y mamadurria.
Y es que cuando el tonto coge la linde, la linde se acaba y el tonto sigue. Aunque es muy relativo llamar tonto a un politicastro, ya que los verdaderemente imbéciles sómos los que los mantenemos en el cargo y particularmente aquellos que los votan ciegamente porque son incapaces de ver que nos llevan al mayor de los desastres. Ya da igual lo que venga, el hecho es que hay que convocar, por narices, un referendúm, un arma que, por otro lado, no se ha utilizado en demasía para consultar al pueblo en todo el periodo de dedocracia que llevamos padeciendo. Puestos a hacerlo y puesto que los politicastros sólo plantean una consultan cuando creen que van a ganar yo les preguntaría a los sindicalistos si el Referendum que ellos y Cayo el Labriego proponen sale adelante y lo pierden, ¿Se van a callar de una vez? Porque queramos que no, recortes hay que hacer y a lo mejor son ellos los primeros, por cojones, que vern recortados privilegios, subvenciones y dádivas.
Es algo extensible a la consulta soberanista que Mariasno el Registrador lleva dilatando tanto tiempo, de manera tan torpe y con tal cortedad de miras que, si no es capaz de salir victorioso de una cosa tan sumamente sencilla, ¿Cómo leches espera sacarnos de la crisis? Si los catalanes quieren una consulta pues se hace según está estipulada en la Constitución, se pregunta a todos los españoles si desean la independencia de Cataluña y se acepta lo que diga la mayoría. Que es para bien, pues proceso penal contra todos los delincuentes nazimbéciles y supresión de la autonomía por desleales según el artículo ciento cincuenta y cinco. Que es para mal, pues se les da la independencia previo pago de lo que se deba a España y se comienza a ejercer cómo si fuera cualquier otro país extracomunitario respetando eso sí, el boicot de productos de ese terruño que la gran mayoría del Pueblo Español haría cómo despedida de los malditos nazimbéciles.
Referendo pero ya.
Y así con todo. Referendo para ver si queremos las autonomías. Referendo para ver si queremos seguir manteniendo chiriguitos autonómicos donde van sólo los enchufados de los politicastros. Referendo para cambiar la Ley electoral. Referendo para ver si queremos que se supriman subvenciones. Referendo para que se creen Cortes Constituyentes que desde que se murió Franco estamos esperando para crear una verdadera Constitución y no esa porquería que tenemos y que nadie respeta. Referendo para ver en que queremos convertir éste país, si queremos endurecer el código penal, si queremos despolitizar la educación, las cajas y dejar atrás porquerizas históricas cómo la Guerra Civil y la Segunda República. Referendo, en fin, para saber si queremos que incapaces, que iletrados, que inútiles, aprovechados, chorizos, estúpidos e imberbes sigan chupando del erario público sin control. Tantas cosas se pueden referendar y andamos pidiendo que un gobierno legítimo pero sin legitimidad nos pare los pies. Que altura de miras.