Reflexiones culturales

Publicado el 03 enero 2012 por Lalolash
Me gusta leer. Lo que sea; un diccionario, una novela, la etiqueta del champú, un tratado de derecho...  Me gusta escuchar historias, ver películas, cortos, documentales. Aprecio la cultura y el arte en todas sus expresiones: Pintura, escultura, moda, fotografía, decoración, arquitectura, literatura, artes gráficas y ocurrencias varias. Pretendo estar al día de lo que ocurre en el mundo, de las opiniones que se generan. Soy consumidora de radio, telediarios, periódicos y revistas. Me gusta aprender, observar, poder acceder a todo y seleccionar lo que más me gusta  para profundizar más.
Por ello, lamento mucho cuando oigo cosas como que ya no se va a publicar más el periódico ADN por resultar inviable a causa de insufiente inversión publicitaria.
No doy crédito cuando oigo declaraciones como las de Lucía Etxebarría que dice que va a dejar de escribir porque son más numerosas las descargas ilegales en Internet de sus libros que las ventas en librerías.
Me inquieta que muchos artistas encumbrados de la música y del cine principalmente, echen la culpa del descenso de sus ingresos a las nuevas tecnologías y a supuestos consumidores sin escrúpulos.
Me indigno cuando se criminaliza al sufrido, paupérrimo y olvidado consumidor de cultura.
Me indigno también con tanto lío con el canon digital, la SGAE y la ley Sinde. Me da la sensación que todo consiste en una incomprensible y enmarañada intervención en el mercado que solo perjudica a autores y a consumidores. Yo es que ya, no me fio de nadie.
Me preocupa que el acceso a información de calidad y a la cultura se convierta en una actividad elitista, si no lo es ya.
Comprendo que la situación de artistas y autores no es buena, ni siquiera justa. Y comprendo que todos nos tenemos que ganar las habichuelas. Pero no siempre se puede vivir de lo que a uno le gusta. Ni siquiera de lo que uno ha estudiado. Que me lo digan a mí. Y lo que me choca es que precisamente gente supuestamente creativa se quede anclada en un pasado cuyas reglas ya no valen. En un mundo tan achuchado y cambiante como es éste, hay que mover el culo y no valen las rabietas.
Menos mal que sigue habiendo personas innovadoras, que se adaptan a las circunstancias, sin prejuicios y emprendedoras que me devuelven la esperanza.
Como BJÖRK con Biophilia, su último proyecto musical. Innovadora como siempre en su trabajo y ahora también en el soporte y forma de expresión; en principio en forma de apps para Apple pero asegurándose de que se puedan piratear para Android y Blackberry.
Otra de estas personas inquietas es HERNÁN CASCIARI, un escritor y periodista argentino. Merece la pena que escuchéis su historia: CÓMO MATAR AL INTERMEDIARIO

Solo el que sabe es libre,
y más libre el que más sabe...
Sólo la cultura da libertad...
No proclameis la libertad de volar,
sino dad alas;
no la de pensar, sino dad pensamiento.
La libertad que hay que dar al pueblo
es la cultura.
MIGUEL DE UNAMUNO