En primavera de 2009 pinté el guardián ciego, que vigilaba el silencio de la piscifactoría abandonada. Durante 5 años he visto como desaparecía su entorno a causa de un incendio que quemó la base de los árboles en verano de 2009. La reforestación de Doa devuelve la vida al guardián de la misma forma en que la naturaleza, asombrosamente, reconquista su espacio.
En primavera de 2009 pinté el guardián ciego, que vigilaba el silencio de la piscifactoría abandonada. Durante 5 años he visto como desaparecía su entorno a causa de un incendio que quemó la base de los árboles en verano de 2009. La reforestación de Doa devuelve la vida al guardián de la misma forma en que la naturaleza, asombrosamente, reconquista su espacio.