Cuando nos planteamos reformar nuestra vivienda puede que desorbiten nuestros ojos al leer el presupuesto, sin embargo aunque a primera vista se nos antoje perezoso podemos ir haciéndolo por habitaciones, poco a poco, según vamos reuniendo la oportunidad, el tiempo y el dinerillo suficiente. Mejor tardar un poco más que hacerlo todo y arrepentirte a los dos meses porque el mobiliario seleccionado no es el que tú querías.
El proceso es el mismo pero los cambios son más disfrutados, son fruto de esfuerzo y dedicación. Adquirir piezas bellas y singulares, que no tienen por qué ser muchas sino versátiles, que puedas ir moviendo por las distintas habitaciones y en cada una de las estancias parecer nuevas.
Las distintas fotografías que os mostramos hoy son de la casa de Jennifer del blog A Merry Mishap, un ejemplo de lo que os comentamos antes, mobiliario muy especial, iconos de diseño mezclados aún con alguna pieza de IKEA que irá sustituyendo poco a poco cuando surja la ocasión.