Refugiados ingratos

Publicado el 18 abril 2016 por Cronicasbarbaras

Entre los diputados electos el 20 de diciembre destaca Ana Surra, uruguaya separatista catalana por ERC, cuyo único trabajo desde la adolescencia hasta sus 64 años actuales fue cobrar como activista de las ultraizquierdas revolucionarias.

Primero, con el terrorismo tupamaro. En otras revoluciones latinoamericanas y entre sus exiliados en Europa, después; luego, llegó a Barcelona en 2004 supuestamente para atender a un nieto que vive allí.

Se hace pasar por víctima de las dictaduras, y seguramente lo fue, pero dados los terrorismos a los que sirvió y de los que vivió, también fue verdugo.

Los tupamaros uruguayos asesinaron desde 1964 hasta diez años después a casi cien personas en 41 atentados, aparte de realizar 23 secuestros y otros actos brutales en la antes “Suiza de América”. La respuesta de los militares fue instaurar una dictadura brutal entre 1973 y 1985.

Los tupamaros se reintegraron –como el arrepentido y expresidente José Mújica--, pero Ana Surra siguió explotando su negocio de exhibirse como exiliada permanente.

Así llegó a España, donde comenzó a cobrar del independentismo para que hiciera feligresía entre los inmigrantes, que en Cataluña sobra el dinero para... PULSE EN EL ENLACE DE ABAJO PARA SEGUIR LEYENDO Y VER A SALAS...

via cronicasbarbaras.blogs.com