Todo comenzó unas semanas antes, cuando desde Regala Cuento, nos pedian unas fotitos de cuando éramos pequeñas, la curiosidad iba en crescendo.
Nos citaron en un lugar maravilloso, un paraiso para los más pequeños........una Escuela Infantil, ni que decir tiene que la bichito se lo pasó en grande.
Después de acreditarnos debidamente a las dos, pasamos al mundo de los sueños y convirtieron a la bichito en una princesa, de momento mamá no iba a ser transformada, pero todo se andaría.
La sorpresa fue muy grata, pues es un regalo inolvidable hecho con cariño y que gustó mucho a las allí presentes.
Y ya sólo nos quedaba coger fuerzas para el camino de vuelta a la tierra, con magdalenas, besitos, tarta con forma de libro y muchas galletas preciosas, nos cargamos de energía y volvimos a nuestro Lagoness algo más cansados de cuando entramos, pero con una gran experiencia vivida.
Gracias a Regala cuento, por esta tarde, y la Galleta Prometida por endulzarnos la velada.