Si la primera parte giraba en torno a Marty y la segunda a Biff, esta tercera está centrada en Doc y sus aventuras en el lejano oeste. Continuando en el punto exacto donde nos dejó una segunda entrega inconclusa, tras unas pocas idas y venidas, rápidamente nos situamos en mil ochocientos ochenta y cinco para ofrecernos un largometraje tan distendido y luminoso como la original, y en un contexto diferenciador que sirve para brindarnos nuevas y divertidas situaciones, eso sí, con un guion menos profundo que el de sus antecesoras. De este modo, el objetivo estaba claro, homenajear los westerns de toda la vida, sobre todo Por puñado de dólares, y permitir al espectador dejarse llevar por una historia sin complicaciones y con las paradojas justas, que a diferencia de las demás, ya no dejaba la puerta abierta a futura entregas, aunque en los tiempos que corren, eso nunca se sabe.
Mi puntuación: 6/10
Mini críticas de toda la saga de "Regreso al futuro".