Una respiración controlada y eficiente y una cierta habilidad para relajarse son factores de vital importancia para combatir de manera efectiva el estrés. Los ejercicios sencillos de respiración y las técnicas de relajación muscular reducen los efectos físicos y mentales del estrés y aumentan el bienestar.
Para conseguir mayores beneficios, es necesario destinar un espacio adecuado donde no se reciban interrupciones y vestirse cómodamente con prendas holgadas y preferentemente de colores claros.