1/27/2013 6:14:00 PM
Precisan que hay 232 muertos. Las autoridades también refirieron que hay 131 heridos por incendio en la discoteca Kiss. La mayoría de víctimas son estudiantes universitarios. De los fallecidos, 120 son hombres y 112 son mujeres.
Comienzan a conocerse los estremecedores testimonios de los jóvenes que han podido sobrevivir al incendio de la discoteca Kiss, que se ha cobrado la vida de al menos 245 personas en Brasil.
«(El artista) estaba cantando. Tenía en la mano, no recuerdo bien, un artefacto que despedía chispas. Ahí, no sé si levantó la mano o cómo fue», pero estas chispas «llegaron al techo, que estaba cubierto de una espuma aislante. Ahí comenzó muy rápido el fuego», dijo Taynne Vendruscolo, de 25 años.
Vendrusculo, estudiante, fue una de las primeras personas en conseguir salir a la calle, gracias a que estaba en un área VIP cercana a la salida. En declaraciones a la televisión brasileña Globo TV, relató que no pasaron ni dos minutos desde que vio el fuego hasta que ya se encontraba al otro lado de la calle.
«Estábamos cerca de la puerta de salida y por eso pudimos salir», cuenta, diciendo que ya en ese momento «todo el mundo estaba empujándose, había personas que se caían al suelo». Y añade: «Al principio creíamos que se apagaría con algún extintor y seguiría la fiesta».
Fuego en el techo
Otra joven, Luana Santos Silva, de 23 anos, también cuenta que el fuego empezó en el techo de la discoteca, junto al escenario. «Fue un amigo el que nos lo mostró; cuando lo vimos, empezamos a salir, la gente empezaba a ser arrastrada en el suelo». Ambas chicas relatan momentos de caos y pánico, cuando las personas, al percatarse del fuego en el techo de la discoteca comenzaron a empujarse para poder salir al exterior.
«Tengo tres amigos de quienes todavía no sabemos si están bien o si les pasó algo... Tenemos informaciones contradictorias, unos nos dicen que alguno de ellos fue encontrado, otros que todavía no. No sabemos nada», ha explicado Luana.
Al parecer, el grupo musical que actuaba en el escenario en ese momento utilizaba efectos pirotécnicos. «En una canción, el cantante hacía una presentación con efectos que provocaron chispas y creemos que fue eso lo que provoco el fuego», dice Taynne Vendrusculo, que recuerda que «todo fue muy rápido, él estaba cantando, paró de cantar y nosotros nos giramos para ver qué estaba pasando y entonces es cuando vimos el fuego en el techo».
Aunque estas dos chicas consiguieron salir de la discoteca sin heridas, no sucedió lo mismo con las personas que iban saliendo después de ellas. Mientras Taynne Vendrusculo se refugiaba en un supermercado que había al otro lado de la calle, por miedo a «una explosión mayor», vio cómo las personas que abandonaban la discoteca después de ella lo hacían «con quemaduras y con falta de aire por el humo, que se había apoderado del lugar provocando el caos». Su suerte, dijo, fue estar cerca de la salida, porque «quienes estaban junto al escenario ya no consiguieron salir».
Casi la totalidad murió por asfixia
El comandante de la Brigada Militar, Cleberson Braida Bastianello, explicó al Jornal do Brasil que las personas se confundieron y en vez de salir por la puerta entraron en los baños, que están al lado. «Casi la totalidad murió por asfixia; en la desesperación para salir, entraron en el baño, donde las encontramos apiladas, casi hasta el techo».
Por su parte, un miembro de seguridad que trabajaba en la discoteca, «cuando el fuego comenzó, fue una desesperación para salir por la única puerta de entrada y salida y muchas personas fueron pisoteadas; todos querían salir al mismo tiempo y mucha gente murió intentando salir».
Algunos supervivientes señalan, además, que los miembros de seguridad bloquearon la salida al pensar que se trataba de una riña y que la gente intentaba marcharse del local sin pagar las consumiciones.
«La ciudad prácticamente se concentró en la calle Rio Branco», donde está ubicado el local nocturno, relató la dueña de una farmacia que queda en frente a la discoteca Kiss. El club es de los más populares de Santa Maria, la quinta mayor ciudad del estado de Rio Grande do Sul, distante 275 kilómetros de la capital provincial Porto Alegre.