Relatos De Una Obsesión

Publicado el 03 octubre 2018 por Carlosgu82

No hay pensamiento en el que no estés,

ni mirada en la que no te vea

cuando te vienes a mi mente.

Y te imagino

en todas las miradas a Poniente.

Y no hay movimiento que no piense que hago

y en el que no estés conmigo.

A mi lado.

Mirando nuestras vidas paralelas.

No hay momento que no recuerde tu cara.

No hay momento del día

que no visite tu alma.

Ni en el que no haga cosas cotidianas

como mirar el reloj, y pensar que te estarás levantando.

Te miro en el espejo cada mañana.

Te construyo, te dibujo… Te imagino.

Te veo en cada movimiento.

Tumbada;

durmiendo, pensando, leyendo.

No hay momento en el que no piense que el destino,

si no nos uniera, estaría cometiendo un error

imperdonable, imposible, impensable.

Y no puedo hacer nada.

Estoy quieta, inmóvil, tranquila.

Calma.

Esa mirada

que vive en millones de vidas,

de momentos compartidos.

Esa mirada

que está a punto de mirarme

todas las mañanas.

Hago recuento del amor que tengo dentro,

que otros me han dado y

te lo envío en forma de mirada.

En cada beso de los demás veo nuestros besos,

cada abrazo que me dan es tuyo

y a ti te dedico cada abrazo que doy.

No encuentro un lugar para olvidarte

porque tú me acompañas.

                                        A todas partes.