Como suele ser habitual en el botiquín de Ecocosas, nuestra sección dedicada a la salud natural, la idea es aprender a utilizar productos fáciles y accesibles que solemos tener en casa, con los que podamos tratar los problemas cotidianos, como un corte, una quemadura (como en este caso con los remedios caseros para las quemaduras), protegerse del sol, etcétera.
La idea es evitar, siempre que sea posible, tener que comprar productos llenos de tóxicos en la farmacia, como la receta de Pomada antiséptica, que cuando la publiqué me consultaron por dos temas también muy importantes que preocupan a nuestros lectores, el de la protección solar, ya que muchos protectores son cancerígenos, al que dí hace tiempo respuesta en protector hecha casero, y el de los remedios para las quemaduras, por lo que hoy nos toca hablar de ello.
Lo primero que tendremos que aprender es contra que nos enfrentamos, el tipo de quemadura y la severidad de la misma, ya que la forma de tratamiento dependerá de estas variables. En general, cuando hablamos de tratar las quemaduras con remedios caseros y naturales, estamos hablando de las quemaduras más superficiales. está claro que las graves debemos ir al centro clínico más cercano para tratarlas.
Tipos de quemaduras
Veamos cuáles son los distintos tipos de quemadura a las que nos debemos enfrentar.
Quemaduras de primer grado
Una quemadura de primer grado es el tipo menos grave de quemadura que se puede sufrir, y comprende solo la capa más externa de la piel, la llamada epidermis. La piel estará probablemente enrojecida y dolorida. También puede haber hinchazón.
En general, si una quemadura de primer grado no cubre una porción significativa del cuerpo y se puede tratar en casa.
Quemaduras de segundo grado
Una quemadura de segundo grado es aquella en la que también está comprometida la segunda capa de la piel (llamada hipodermis). En este tipo de quemaduras, la piel estará muy roja e incluso puede haber manchas, y es probable que se formen ampollas en el área de la quemadura, normalmente hay supuración de liquido y la posible perdida de parte de la piel.
Una quemadura de segundo grado por lo general causa un dolor severo e inflamación.
Este tipo de quemaduras ocurren comúnmente por líquidos calientes, si la extensión de la misma no es muy grande la podemos tratar en casa. Si la extensión es mayor de 4 cm, o el dolor no es soportable, o la parte comprometida involucra a la cara, manos o pies, es aconsejable acudir a un centro de salud.
Quemaduras de tercer grado
Una quemadura de tercer grado involucra todas las capas de la piel y, posiblemente, las estructuras que están por debajo de la piel también. Algunas áreas de una quemadura de tercer grado pueden estar carbonizadas. El dolor puede ser severo, pero si un nervio ha sido dañado por la quemadura, es posible que se sienta poco o ningún dolor. Todas las quemaduras de tercer grado requieren de atención médica de emergencia. Las quemaduras con químicos y eléctricas suelen ser de tercer grado.
Quemaduras de cuarto grado
Hay daños de músculos y huesos. Suelen presentarse en quemaduras por frío extremo y congelación. Este tipo de quemadura siempre debe ser vista por profesional cualificado en un centro de salud u hospital.
Cómo curar una quemadura leve
Puestos en materia, si la quemadura no es muy grande o no representa gravedad por ser de primer grado, se puede tratar en casa. Las quemaduras más típicas en el hogar son con agua caliente, por exposición solar, por fuego, por el uso del horno, etcétera. Todas estas en general, si no son graves, las tratamos en casa. Ahora veamos como hacerlo sin pomadas amarillas ni otros potingues.
Hidratar y enfriar la herida
Cuando sufrimos una quemadura lo primero es hidratar la piel, para esto la forma mas sencilla es poner la parte afectado debajo del grifo de agua fría, también si tenemos a mano se puede utilizar te frío, vinagre de manzana o rodajas de pepino. Si la quemadura no es por frío podemos usar hielo ya sea con agua o directo sobre la misma.
Miel para quemaduras
Una vez que hidratamos y refrescamos, debemos atacar los microbios ya que la piel esta expuesta y se puede infectar. Por suerte en casa suele haber un potente producto antibacteriano. Está por lo general en nuestra alacena, y se trata nada más ni nada menos que de la miel.
La miel y el propóleo son excelentes para una quemadura, ya que harán de barrera para que nada entre en la piel ni salga y aportara actividad anti-bacteriana, ademas la miel atrae y absorbe la humedad, lo que también ayuda así que pondremos una cucharada de miel sobre la herida, y cubrimos con un gasa o film plástico en su defecto, el film plástico sirve por que evita perdida de humedad pero por otro lado no permite respirar la piel, por lo que hay que quitarlo cada tanto para dejar que esta respire.
Al segundo día vamos controlando la evolución, y agregando miel. No debemos lavar. Si todo va bien, no es necesario y así hasta que ya veamos que cicatriza sin problema. Eso sí, cada vez que quitamos la gasa o el film para agregar miel, dejaremos la herida destapada por una hora para que mantenga contacto con el aire.
Otra ayuda es durante estos días comer miel y bananas (plátanos). El potasio que contienen ambos alimentos es muy hostil hacia las bacterias dañinas y organismos causantes de la necrosis.
Gel de aloe vera para las quemaduras
El gel de aloe vera que vimos como preparar en casa es perfecto para la piel y sirve bien para las quemaduras menores y las solares. Su uso es muy sencillo. Una vez hidratada la quemadura y una vez que dejamos secar, añadimos sobre toda la superficie enrojecida el gel de aloe, el cual además de ayudarnos a curar la quemadura y regenerar la piel, nos proporcionará un fresco alivio.
Aceite esencial de lavanda, excelente remedio casero para las quemaduras
El aceite esencial de lavanda, que actuara contra la infección, es muy útil a la hora de curar quemaduras de aceite. Quizás lo mejor no es utilizarlo como primera opción, sino tras haber calmado la zona con aloe o miel. Pero lo bueno del aceite de lavanda para las quemaduras es que acelera notablemente la curación de la piel.
Remedios caseros para quemaduras de sol
Para curar las quemaduras de sol, el gel de aloe va muy bien, pero otro de los remedios caseros para tratarlas es sin lugar a dudas el vinagre de manzana. Debe estar diluido en una proporción de una cucharada por litro de agua aproximadamente. Los resultados son muy buenos.
Otros remedios para quemaduras
Siempre en el caso de las quemaduras leves o superficiales, las que afectan a la primera y segunda capa de la piel, y que abarcan zonas pequeñas o que no afectan o comprometen el rostro y las manos o pies, el aceite de germen de trigo por su alto contenido de vitamina E ayuda a cicatrizar y regenerar la piel de manera asombrosa. El pepino, ya sea en rodajas o batido (hecho una pasta) puede ser un gran aliado a la hora de tratar las quemaduras.
La próxima semana haremos una pomada para quemaduras usando aceite de oliva, miel y algunas hierbas.
Observaciones de sentido común que nunca vienen mal
Los niños pequeños ir al medico y menores de un año no pueden ingerir miel, los alérgicos a los propóleos tampoco. Si la quemadura es muy grande, si se infecta o si tenemos dudas, lo mejor es ir al centro de salud mas cercano. Esto es una guía y se debe tomar como tal, cada uno debe hacer lo que le parezca correcto para sí mismo, siendo al mismo tiempo responsables. No debemos jugar con las cosas graves y que deben ser tratadas por especialistas de la piel y la salud en un centro médico u hospital.
Este post es autoría de Ecocosas puedes ver la entrada original en Remedios caseros para quemaduras y cómo tratarlas de forma natural