1-ARCILLA VERDE: Purificar la piel y desincrustar las impurezas son dos de los beneficios que se le dan a la arcilla verde. Una vez por semana, diluye 4 o 5 cucharadas de este tipo de arcilla en una infusión de caléndula o en un vaso de jugo de pepino hasta conseguir una pasta de textura homogénea y aplica sobre el rostro, evitando el contorno de los ojos. Cuando notes que la mascarilla empieza a cuartearse, retira con agua tibia.
2-ENEBRO: Para acelerar la curación de los granos de acné y evitar que estas lesiones dejen marcas en la piel, nada mejor que diluir 10 gotas de aceite esencial de enebro en un vasito de agua, mojar un algodón en el preparado y extender la loción sobre la zona afectada. La esencia de enebro es un excelente antiacneico natural, debido a su triple acción antiséptica, seborreguladora y cicatrizante. Si un grano se te resiste, aplica una gota de este aceite directamente sobre la lesión.