Hoy os traigo un nuevo post de reparación de las baterías de alta tensión. Nos centraremos en averías relacionadas con sensores, fusibles y la placa con los relés contactores.
Comenzaremos por lo más fácil de comprobar, los fusibles. Estos pueden ser de tipo estándar, de cartucho o maxi fusibles.
Sea cual sea el fusible que monte la batería, en él se puede ver grabado el amperaje máximo que admite y se comprueba con multímetro en escala de ohmios o continuidad. La resistencia se debe medir siempre en vacío, es decir, sin corriente en el circuito. Es necesario desmontar los fusibles para no medir también la resistencia de los cables a los que está conectado.
Los fusibles nunca deben dar un valor infinito, seria síntoma de que está fundido, ni un valor óhmico muy alto, síntoma que tienen resistencia interna y están creando una caída de tensión.
En algunas baterías, el propio enchufe de seguridad de color naranja dispone internamente un fusible de seguridad. Se puede comprobar si está fundido poniendo las puntas del multímetro en ambos contactos del enchufe. También dispone de terminales de información que indican a la BMS que el enchufe está bien conectado. Estos contactos si se rompen, pueden mostrarse como avería en una lectura con útil de diagnosis. Algunos terminales de cables de alta tensión también tienen estos terminales y se deben comprobar con el multímetro en continuidad.
Los sensores de temperatura pueden tener distintos diseños y tamaños, algunos incluso disponen de pasta térmica para que no exista problemas de contacto con los elementos. Estos sensores son resistencias tipo NTC, con lo cual, disminuye la resistencia cuando aumenta la temperatura.
Para realizar esta comprobación es importante desconectar la batería de la red eléctrica del vehículo y dejarla reposar unas 12 horas para equilibrarla a temperatura ambiente. El multímetro debe estar en escala de ohmios, y al igual que los fusibles, se debe medir en vacío, retirando el conector eléctrico del sensor y midiendo en los propios pines del conector. Se suelen montar los mismos sensores repartidos por la batería, y la resistencia obtenida debe ser similar en todos. Si la resistencia de un sensor se desvía un 5 % de la media, ese sensor se debe sustituir. Es posible que para sustituir el sensor se tenga que desoldar el defectuoso y volver a soldar el nuevo.
A modo de sensor, también existen los interruptores RAD. Son unos interruptores normalmente cerrados (NC) que se montan en la cara lateral de uno de los elementos del módulo. Si alguno de los elementos se hincha, este aumento de volumen se transmite hasta el interruptor y los contactos se separan. Se puede desmontar y comprobar la continuidad con el multímetro en estado de reposo (NC).
En los relés contactores se puede comprobar la resistencia de su bobina y los contactos de cierre y apertura. Generalmente, los relés disponen de 4 contactos, 2 para la bobina y 2 para los contactos. Si no se especifican cuál es cada contacto, con el propio multímetro se puede averiguar cuál es cada uno.
Con el multímetro también en escala de ohmios o continuidad, poner las puntas en todos los contactos empleando todas las combinaciones. Los relés en reposo mantienen los contactos abiertos para no dejar pasar corriente, por lo que los 2 contactos que midan resistencia son los de la bobina. Si los contactos de la bobina miden mucha resistencia o el valor es infinito, la bobina está cortada.
Los otros dos contactos deben dar infinito cuando el relé está en reposo. Si se aplica una tensión de 12 V a la bobina del relé, los contactos se cierran y se debe ver en la pantalla del multímetro que hay continuidad.
Otra avería en esta zona es la rotura de la resistencia de precarga. Generalmente, son de 30-40 Ω. Con el multímetro se debe medir la que la resistencia es aproximada a la nominal, en caso de valor infinito, la resistencia está cortada.
En el siguiente post veremos averías de fallos de aislamiento y en las unidades BMS.