Tres partidos con diferentes sabores de boca los que no he podido plasmar esta semana. Por un lado, la buena actuación de Semih Erden o la de Shaquille O´Neal. Por otro, la derrota anoche ante los Washington Wizards, tras dejarnos remontar y ver como el novato John Wall sentenciaba practicamente con un triple.
Sin embargo, el hecho de que los Miami Heat hayan cosechado cuatro derrotas seguidas, no hace temer por el momento el liderazgo al frente de la Conferencia Este. Boston sigue liderando firmemente la clasificación y aún nos mantenemos segundos en la liga, sólo superados por los San Antonio Spurs.
Ante los Detroit Pistons, Shaquille O´Neal realizó un auténtico partidazo firmando dobles dígitos y un nuevo doble-doble a su carrera. Sus números, 12 puntos, 12 rebotes, sumados a los 22 tantos de Paul Pierce fueron el pilar sobre el que se sustento el equipo. En resumen, partido de bajo ritmo, con malos porcentajes de tiro y en el que nos dejamos contagiar por el estilo de juego de los de Michigan. Los Pistons nos han tomado la medida, eso queda claro.
El siguiente encuentro, ante los Utah Jazz en el TD Garden. Buen partido para la NBA con la actuación de dos de los mejores bases de la liga. Rajon Rondo no defraudó, 12 asistencias, 5 rebotes y 3 robos. Fuimos superiores en el tiro y esa fue la principal baza que tuvimos ya que en el rebote ninguno de los dos equipos sobresalió por encima del otro. Por contra, pese a hacernos con la victoria, Shaquille O´Neal se tuvo que ausentar del encuentro tras seis minutos merced de una lesión la cuál le obligó a tomar reposo para el encuentro ante los Wizards de anoche, en el cuál no se vistió de corto.
Con todo, los Boston Celtics siguen afrontando la temporada con el mejor record del Este, (33-10). En otro órden, Avery Bradley ha sido relegado a los Maine Red Claws, equipo afiliado de la D-League y ante el hueco dejado en la posición de pívots, cada día son más y más intensos los rumores que siguen situando a Rasheed Wallace en los Celtics nuevamante.