[Reportaje] Famicom y sus 30 velas
Salvador Belizón Campaña 14 septiembre, 2013 0
Todo tiene un origen. El de los seres humanos se remonta a la época de la Prehistoria, el del cine al famoso tren de los hermanos Lumière, o nuestro odio a las matemáticas a los Cuadernillos Rubio que hacíamos en verano. Por citar un par de ejemplos. Por supuesto, los videojuegos también tienen un principio, una iniciación. Aunque algunas fuentes discrepan al respecto, de forma consensuada pudiera decirse que el primer videojuego comercial de la historia es el Pong, aquel simple y adictivo software donde debíamos mover un palo para que la bola -que ojo, era un cuadrado- se colara en la portería del contrario y evitar lo propio en la nuestra. No obstante, para hablar de los videojuegos en nuestra actualidad, de la industria tal y como es hoy día, hemos de citar un suceso más “reciente”. Hay que retroceder menos en el tiempo para encontrarnos con el primer hito de la compañía del fontanero más famoso del mundo: Nintendo. Así pues, gracias a la consola de sobremesa Famicom, los videojuegos no solo existen a día de hoy, sino que lo hacen con la fuerza que ya sabemos, así como a través del sistema de adquisición tan habitual en nuestros tiempos. ¿Queréis saber más? ¡Vamos pues allá!
Aquí tenéis: una Famicom en toda su gloria.
ORÍGENES – Cómo conocí a la Famicom
A inicios de los años 80, la industria del videojuego estaba sufriendo una letal crisis promovida, en una inmensa parte, por la compañía Atari. Tal declive venía propiciado por un aluvión de juegos de baja-mediocre calidad, de alto precio además, que hacía que los jugadores se lo pensaran mucho antes de realizar la compra de un nuevo producto. ¿Quién quiere gastarse un gran dineral en algo que no es merecedor de tal coste? Este bastante joven mercado comenzaba a venirse abajo.
Pero una inexperta Nintendo no pensaba permitirlo. Frente a todo pronóstico, la otrora casa de cartas japonesas se lanzaba a crear hardware para sustituir los desfasados sistemas que había entonces. Nacía así la GameCom en 1983, que finalmente sería bautizada como Famicom (Family Computer). Con la situación tan inestable, la Gran N intentó abaratar los costes de producción de la consola lo máximo, logrando ponerla al mercado por 14.800 yenes, unos 112 euros aproximadamente, evitando así asumir riesgos innecesarios. Un precio bastante asequible que traía consigo una pequeña consola de tonos blanquecinos y rojizos, con dos mandos a los que se le implementaron micrófonos y la posibilidad de intercambiar juegos a través de la inserción de distintos cartuchos. Una novedad para la época,a costumbrados a pequeños aparatos que tenían un único juego en su interior. Claro ejemplo de ello era los aparatos Game & Watch.
Dad gracias a que Nintendo no se alió a Atari. Así habrían sido vuestras NES.
La nueva consola consiguió un éxito arrebatador en el país nipón, desbancando de pleno a su competidora Sg-1000 de SEGA. Era lógico lanzarse a conquistar al mercado occidental. Más lógico era empezar por la mayor potencia de la región: Estados Unidos. De mayor cordura aún si cabe, era aliarse con la mayor compañía del lugar en aquel momento: Atari. A través de un acuerdo que estuvo a punto de firmarse y que finalmente no fue debido a los problemas económicos de la casa norteamericana para cerrar el trato, hubo un intento de nacimiento que resultó aborto llamado Nintendo Advanced Video System. El perfil del nuevo sistema de la casa comenzaba a cambiar para América: tonalidades grisáceas y negras se alejaban del blanco y rojo característicos del producto original. Algún vestigio de carmesí quedaba en los botones. Los vaivenes con Atari impidieron que se pudiera lanzar el aparato en 1983 al igual que en el país de origen. Pero lejos de rendirse, la empresa japonesa le dio un par de vueltas a la rueda y ya en 1985 presentaba la sobremesa que todos llegamos en su día a conocer: la NES (NintendoEntertainment System). Por aquel entonces, ya presentaba el diseño por el que es conocida. Los minoristas y comerciantes de norteamérica estaban escaldados de los videojuegos por el dinero invertido – y perdido- debido al declive de estos en los últimos años. Nintendo jugó “sucio” pero supo hacerlo bien: vendió la reconversión de Famicom no como una consola, sino como un mero y llano juguete. Igual por eso en la actualidad, los videojuegos se consideran (cada vez menos) cosa de niños…
Sea como fuere, el experimento, respaldado por aparatajes varios como R.O.B de los que os hablaremos a continuación, fue un éxito y se comenzaron las andaduras de NES por el territorio del tío Sam. Haría lo propio en Europa a partir de 1986 con una distribución desigual, en especial en países como España, donde había pocas consolas y algunas eran de la versión asiática.
¿Ésta os suena más, verdad? Así resultó ser NES, la “Famicom” occidental.
Lentamente y hasta alcanzar 1995, momento en el que le cedió el puesto de pleno a Super Nintendo para que compitiera por igual contra la Mega Drive de SEGA, tanto Famicom como NES en cada uno de sus territorios fueron sumando éxitos y beneficios a la compañía, hasta lograr la friolera de 60 millones de ejemplares colocados en las casas de todo el mundo. Tal ovación fue mayor al incluir de serie el juego Super Mario Bros., hito sin duda alguna de los plataformas y de los juegos en general. Pero eso, como ya sabéis, es historia.
SUS JUEGOS – Joyas atemporales
Famicom o NES en nuestro país, destacó por varias cosas. Una de ellas es su estilizado diseño, más trabajado incluso si cabe para Occidente, más incluso que el de algunas consolas actuales con aspectos visuales de lo más detestables. Pero “el motivo” de su éxito, fue su software. Lo que es lo mismo: sus juegos.
Con un catálogo muy amplio y variado para lo que se podía ofertar en la época, Famicom vio nacer algunas de las grandes joyas que a día de hoy más gustan entre los jugadores casuales y los nintenderos. Una pequeña muestra de estos fueron:
SUPER MARIO BROS.
It´s-a-me, Mario! Ju ju!
¿Hace falta alguna presentación para el juego más conocido de todos los tiempos? El mayor vende-consolas de NES traía consigo la historia de Mario Bros. y su hermano Luigi (en modo multijugador) que debían rescatar a la princesa Toadstool de las garras del malévolo Bowser. De mecánica simple, había que saltar para derrotar a los principales enemigos de la saga tales como Goombas o Koopas, hacerse con champiñones o flores de fuego y…saltar sobre el malo maloso para hundir el puente sobre la lava que conducía…a un Toad que te mandaba a otro castillo generalmente. Menuda paciencia había que tener.
Su continuación, Super Mario Bros. 3 cuajó una fórmula ya de por sí redonda, añadiéndole un colorido mejorado bastanta palpable, nuevas transformaciones a destacar la rana y el mapache o tanooki. Para muchos, el mejor Super Mario de todos.
MEGAMAN
En sus inicios, el éxito de Megaman estuvo por las nubes.
El más conocido en Japón como Rockman, comenzaba sus andaduras con su mega-blaster en la época de la primera consola de Nintendo. este pequeño azulado robot tenía que vencer a los jefes finales para adquirir sus habilidades y poder sortear con mayor facilidad los cuantiosos retos que este juego ofrecía. Todo ello, para frenarle los pies al genio malvado Dr. Willy. Un juego no apto para jugadores noveles por su elevada curva de dificultad. Su continuación, Megaman 2, que también salió para el mismo hardware, asentaría las bases iniciadas en esta primera entrega y le otorgaría un podio de lo más alto…que el tiempo le acabaría arrebatando.
THE LEGEND OF ZELDA
Esta frase es más conocida que la Famicom y La Macarena juntos. Y os marcó la infancia mucho más.
Se hace raro ver este título sin nada a continuación, pero es que vamos a hablar de la primera entrega de la saga. Un recién inventado Link debía recorrer Hyrule para deshacerse del retorcido Ganon (que era un cerdo con un diseño muy diferente al del actual Ganondorf) y conseguir, por vez primera en nuestra vida -que no según la cronología oficial de Nintendo- la Trifuerza. No oirás una frase más conocida de los videojuegos que “It´s dangerous to go alone. Take this”. Pues apareció en este juego. De verdad.
Su peculiar segunda parte, de scroll lateral, saldría no mucho después. También cuenta con una secuencia especial. Aquella en la que Link se relajaba en el hogar de una alegre pueblerina y se le recargaba la vida por completo. La imaginación es libre.
ICE CLIMBER
Popo y Nana siempre quisieron llegar a lo más alto.
Los dos pequeños esquimales Popo y Nana, el cartucho podía jugarse a dobles, debían escalar a base de picar hielos de la base de la planta superior y derrotar a los enemigos del camino – especial atención al oso polar con bañador y gafas de sol- para llegar al Pterodáctilo que les recogía a ambos en la fase de bonus. Adictivo y mítico juego donde los haya.
Algunos de sus elementos, como las berenjenas de las fases extras o los tacos de hielo trascendieron a posteriores exclusivas de Nintendo.
BATTLETOADS
Las ranas antropomórficas de este juego repartían estopa de la buena. Si los enemigos se lo permitían claro está.
La demostración palpable de que los juegos de antaño eran más difíciles que los de ahora con diferencia, se materializa en Megaman y en el juego que nos ocupa. Battletoads, juego creado por la Rare que todavía merecía la pena, relataba el rescate de dos ranas llamadas Rash y Zitz para poner en libertad al tercer integrante de su grupo y a una tal Princesa Angélica. Es igual, lo que de veras importa es la dificultad del título, lo divertido que era pegar mamporros a los enemigos con puños o ancas gigantes y el humor que destilaba en general este hack and slash.
Hay muchos otros juegos como el primer Metroid, Solstice, Excitebikes, Punch-Out! o Circus Charlie que se ganaron un hueco en el corazón de muchos. Las maravillas de Famicom son incalculables.
PERIFÉRICOS – Complementos para poner guapa a tu Famicom o NES
Desde Eye Toy pasando por Kinect o Balance Board, cualquier consola de la historia ha tenido algún tipo de accesorio único que ha servido…normalmente para poco. Nuestra homenajeada no iba a ser menos, y aunque tiene una serie de añadidos peculiares y más extensa que la que os vamos a enseñar a continuación, hemos decidido traer aquellos más usados por los usuarios, los más conocidos…y los más extravagantes.
ZAPPER
El accesorio más conocido y usado de todos. Al menos para los usuarios de NES. consistía en una especie de pequeña pistola láser que servía para los pocos shooters que existieron por aquel entonces. ¿El más conocido? Ese que más escamó a los infantes de medio mundo: Duck Hunt. el juego consistía en disparar a los patos que aparecían por la pantalla apuntando con
Esta pistola era de verdad cuando tenías 5 años y jugabas con tu NES.
nuestro Zapper y presionando el gatillo. De este modo, el travieso sahueso que por allí andaba recogía el trofeo caído. No obstante, cuando fallábamos en nuestro objetivo, se reía descontroladamente de nosotros, lo cual levantaba la ira y suscitaba el disparar contra el can. Lástima que Nintendo no permitiera lanzar bala alguna contra él. Más de uno lo habría dejado como a un colador.
Otro juego conocido fue Wild Gunman, una suerte de simulador de pistolero del Lejano Oeste, donde debíamos acabar con los forajidos que azotaban el poblado, salvaguardando la integridad de los transeuntes y civiles inocentes. Una gozada para la época. Algo más sencillo que Duck Hunt, pero más variado y divertido.
Podría decirse que era como jugar en unas recreativas, pero con la comodidad de casa. No obstante, el reducido tamaño y peso del Zapper lo hacía muy manejable para jugadores de todas las edades.
R.O.B
En esta imagen seguro que te cae mejor que en el Emisario Subespacial. Fijo.
Como su nombre (Robotic Operatyng Buddy) y siglas indican, se trata de un robot peculiar de características muy limitadas. Apenas usado para dos juegos (Gyromite y Stack-Up), el robot seguía con los brazos y “sus ojos” la partida, incluyendo algunas funciones adicionales el jugar con él. No gozó de mucho éxito, pero es curioso – y aburrido- ver como se usa este fiel compañero.
Probablemente es más conocido por su aparición en juegos como Mario Kart DS o Super smash Bros. Brawl, en el que se le podía escoger como personaje jugable.
POWER GLOVE
Otro aparato de movimiento. Este guante con claros tintes del cine de ciencia ficción de finales de los 80 permitía mover al personaje del videojuego a través del uso de los dedos. Es rarísimo de encontrar hoy en día, aunque si queréis verlo su caja lucía así:
El poder del control…en tus manos. Ya nos entendéis.
POWER PAD
El clarísimo precursor del juego Dance Dance Revolution. El Power Pad consistía en una alfombra, bastante más cargada y menos funcional que la análoga del juego de baile citado, que permitía el uso del juego en cuestión a través de la presión de uno de los doce botones con los que contaba dicha alfombra. Hubo otras versiones más “simplificadas”, pero su funcionamiento era exactamente el mismo.
Abuela: nieto, ¿ese es mi ábaco, o tu Tres en Raya?
Tal y como se puede apreciar, la primera consola de éxito de Nintendo no sólo fue importante para relanzar a la compañía a la posición de gran magnitud en la que se encuentra ahora, sino para reflotar un mercado que no existiría seguramente y de haber sobrevivido, sería mucho peor que el ahora existente. Es por eso que Famicom no es una consola. Es casi una leyenda.