Entre la ministra de trabajo de cuya empresa familiar lleva meses sin pagar a sus trabajadores. El ministro de agricultura, señorito jerezanos con interese familiares en latifundios y petroleras como responsable del medio ambiente. La del jaguar que decía que los niños andaluces son incultos y estudian por los suelos. Y el eterno aspirante a quien le limpian los zapatos en el Ritz, la imagen de Andalucia que tiene la derecha deja mucho de ser real, y desde luego no son lo mejor de esta tierra.