Representantes de 130 países iniciaron el 24 de enero en la localidad de Chiba, al este de Tokio, una reunión de la ONU para elaborar el primer convenio internacional para reducir el uso de mercurio, que se espera adoptar en 2013.
Se trata de la segunda sesión, después de la celebrada en junio pasado en Estocolmo (Suecia), de un total de cinco que ha previsto el Programa de Naciones Unidas para el Medioambiente (PNUMA) hasta el año 2013.
En Chiba, unos 600 representantes gubernamentales y de organizaciones no gubernamentales analizarán el borrador de un tratado internacional que presentó el año pasado el PNUMA para prohibir y restringir la exportación de mercurio, así como la venta de productos a base de esta sustancia.
Este acuerdo internacional también busca reducir a cero la emisión o vertido de este metal al medio ambiente.
En la inauguración, el viceministro japonés de Medio Ambiente, Soichi Kondo, dijo que "Japón trabajará activamente en la elaboración del tratado para promover medidas que prevengan la contaminación por mercurio en el mundo", según citó la agencia local Kyodo.
Japón ha propuesto que el nombre de este eventual tratado honre la tragedia de la ciudad japonesa de Minamata.
En esa localidad se detectó en la década de 1950 un síndrome neurológico causado por contaminación de las aguas de esa ciudad japonesa por el vertido de mercurio por parte de una planta petroquímica.
Tras el brote en Minamata, Japón redujo el uso de mercurio de 2.500 toneladas anuales en 1964 a 10 toneladas anuales en sus proceso químicos.
Pero Japón aún emite entre 20 a 30 toneladas al medio ambiente a través de la combustión de carbón y exporta más de 100 toneladas.
El mercurio era hasta hace pocos años un componente habitual en sustancias químicas, pilas, termómetros o incluso empastes dentales.
Fuente: efeverde