En tiempos remotos, el Elfo Guardián de la Piedra de los Cuatro Elementos fue traspasado por los colmillos de las sombras. Pe-ro, antes de que aquella traición lo devorase, proclamó un edicto sagrado en preservación de la supervivencia de las razas.
Tras la ruptura de la Piedra, el hijo del Guardián, proclamado: Señor de los Elfos de Luz, guardó con devoción el elemento Aire.
El elemento Tierra hizo fructificar los valles del oeste.
El elemento Fuego se convirtió en un bello don para los hombres mortales, un símbolo de imperecedera amistad.
Fatalmente, el Elfo Oscuro hurtó el elemento Agua: amparado por las tinieblas, logró mutar los océanos y los ríos en descomunales témpanos. Y su codicia se acrecentó al igual que sus tropas de guerreros malditos.
En los tenebrosos tiempos en que transcurre esta historia, los elfos crueles se despliegan comandando ejércitos de divinidades transfiguradas. Empeñados en reunir las piedras del poder y en derrocar al Rey de los Elfos de Luz, devastan territorios aliados, corrompen corazones puros y saquean ciudades enteras.
¡Muchas gracias a la autora por el ejemplar para la reseña!
Creo que todo lector argentino ya conoce este libro, incluso quizás lectores de los demás países de latinoamérica. Porque fue un boom y sigue teniendo repercusiones. A este libro, lo conocí allá por el 2015 cuando se realizó la primera Convención Blogger Argentina en la FILBA y Danny (su autora) estuvo allí presentándolo. Recuerdo que quería leerlo desde entonces. Danny siempre fue una autora que admiré por todo lo que logró, los fans que consiguió y el boom que tuvo su novela. Pero me acobardaba a hablarle para leer su obra... hasta que a fines del año pasado que me animé. Ella es re dulce y tooodo mi miedo se esfumó enseguida. Hablamos de muchas cosas y me calló muy bien. Tuve que hacer a un lado todas mis lecturas pendientes y leerme a Orlíms, no quería hacerla esperar con la reseña. Aunque mi historia con el libro fue otra cosa... y ahora verán por qué.
Comencé el libro re emocionada, la narración era exquisita y fluida, quizás un poco lenta en ocasiones pero era necesario: Danny había creado un mundo completamente nuevo y debía describirlo. Un mundo llamado Nílindor, lleno de magia y seres increíbles como: las hadas, enanos, feas criaturas y principalmente elfos, aunque también hay humanos. Nuestro protagonista es Orlíms, un elfo, el príncipe del Valle de Mindáwint y a él no le va mucho la idea de ser rey. La historia comienza así, Orlíms debe partir obligado de su tierra a las tierras de su tío mandado por su padre, el rey, para realizar tareas como el príncipe que es. Pero a Orlíms le interesan más las aventuras que las formalidades así que no tardará en irse por ahí a buscar diversión. Más que con diversión se topará con problemas, batallas y demás. Un oscuro secreto guarda su familia y no tardará en enterarse. La oscuridad quiere apoderarse de todo y los reinos van a tener que defenderse. Orlíms no se quedará de brazos cruzados y así, tendremos una historia llena de acción, magia y amor.
Bueno, como decía en un principio, mi historia con el libro fue otra cosa y ahora les voy a decir por qué. Y... mi problema fue engancharme. No tenía, ni sentía ganas o ánimos para terminarlo. ¿Por qué? En un principio no sabía, pero luego me di cuenta cuál era el motivo: el amor. El amor en este libro se me hizo falso, forzado y muchas veces innecesario. Okay, entiendo de dónde viene el instalove, son cosas que ya se nos presentan anteriormente para tener una idea, pero no dejó de hacerme ruido de todas formas. No soporté lo poético que fue tipo "Eres como el sol que ilumina mis mañanas" o cosas así, no es lo mío sinceramente, soy más sencilla, y ojo que yo he leído romance histórico dónde son más poéticos y demás pero nunca a este nivel. Y reconozco que no tiene nada de malo y que el problema soy yo. PERO esta es mi opinión así que vengo lo que vine a decir: ese tipo de romance poético se me hizo demasiado denso. ¿Pude acostumbrarme y no darle mucha importancia? Sí, pero bueno. No me maten, pero tampoco me gustó mucho Orlíms. Soy más de Eliseo. Me parece un personaje súper interesante.
Bueno, pero el libro me gustó mucho así que les voy a decir que fue lo que amé. Amé como Daniela narró las batallas, me atraparon por completo y cada vez que había una escena de guerra yo no podía parar de leer. Amé la historia, el secreto, las piedras, los elfos, las criaturas horrorosas, el amor entre hermanos, entre amigos, las batallas SEÑOR LAS BATALLAS, y amé no dejar de pensar de que tremenda imaginación era algo nacional. Una vez que el amor en este libro fue dejado de lado, me lo devoré, hasta la última página, quedándome insatisfecha y con ganas de más. Quiero saber que pasará, si el bien triunfará y más batallas, porque debo reconocer que Daniela tiene una pluma espectacular para describir batallas. Algunos pajaritos por ahí me dijeron que en El Titiritero conocemos más a Eliseo así que estoy emocionada. Espero leerlo algún día.
Sacando el tema del romance, el libro me encantó. Mi personaje favorito fue Kenzon, el mejor amigo de Orlíms y, Eliseo también, fue un personaje del que quiero saber más. Los personajes en sí me gustaron, están bien construidos, cada uno con su personalidad, etc. Es un libro que recomiendo, si te gusta la magia, los elfos y las batallas. A pesar de todo el tema del romance, puedo decir que vale la pena, excelente historia.
¿Lo conocían?
¿Qué piensan de él?
Besos enormes,