Leeré todas las novelas de Ali Hazelwood porque me fascina como es capaz de crear siempre los mismos personajes y que yo me enganche una y otra y otra vez. Poque esta es la misma trama de siempre con los mismos personajes de siempre pero con muchas más escenas explícitas (de ahí que me gustara algo menos creo). Y no me quejo. Esto es lo que quiero ni más ni menos.
Rue solo folla y solo una vez con cada chico con el que queda. Eso es exactamente lo que planeaba hacer cuando llegó a ese hotel hasta que su hermano interrumpe el encuentro y ya solo quiere volver a casa. Lo que jamás se pudo imaginar es que ese misterioso hombre con el que había quedado iba a reaparecer en su oficina para adueñarse de la empresa en la que trabaja y eso es algo que Rue no va a permitir. Pero el amor llega cuando menos te lo esperas y en brazos de quien menos te lo esperas.
Eli y sus socios solo tienen un objetivo: comprar Kline. Lo que menos podía sospechar Eli es que Rue trabajará en esa empresa. Rue a la que no podía sacarse de la cabeza ni queriendo, Rue que le perseguía en sueños. De todas formas eso no iba a impedir que consiguiera lo que queria. Solo tenía que aguantar unos meses y lograr su mayor objetivo d elos últimos diez años.
Como digo esta es la prototípica historia de Ali Hazelwood sin mayor intención que entretenerte un rato. Si que se añada el componente de enemigos con derecho podríamos decir. Como dije antes, creo que tanta escena explícita no es lo mismo. Soy más de imaginar a que me describan con detalles (me da lache, ¿qué hago?). Pero por lo demás es altamente entretenida y si os han gustado las novelas anteriores de esta autora, esta no os defraudará