Nº de páginas: 143
Editorial: Anagrama
Saga: Autoconclusivo
Precio: 14.90€
ISBN: 9788433969194
Sinopsis: Esta novela de inspiración autobiográfica, que ha obtenido un enorme éxito en Francia, cuenta la historia de una joven belga que empieza a trabajar en Tokio en una gran compañía japonesa. Pero en el Japón actual, fuertemente jerarquizado, la joven tiene el lastre de un doble handicap: es occidental y mujer, lo cual la convertirá en blanco de una cascada de humillaciones y de una progresiva degradación laboral que la llevará a pasar de la contabilidad a servir cafés, ocuparse de la fotocopiadora y finalmente encargarse de la limpieza de los lavabos masculinos.
Estupor y temblores es la historia de una joven belga educada a la japonesa que comienza a trabajar en la compañía Yumimoto. Allí tendrá que enfrentarse a sus nuevas responsibilidades, a la jerarquía de jefes que la pondrán por los suelos por el hecho de ser mujer y occidental y a su inmediata superiora, Fubuki.
Comencé la novela con ganas, ya que era corta y aproximádamente me debería haber durado una hora y media, pero no fue así. Se me hizo demasiado repetitiva y aburrida, ya que siempre ocurre lo mismo: a la prota le dan un trabajillo, lo hace mal, la riñen de forma exagerada, sus errores salpican a otros compañeros y entonces le dan un trabajo "peor" al que tenía. En eso se resume la trama de Estupor y temblores.
La protagonista me ha parecido una mujer fuerte capaz de afrontar todo con humor, en ocasiones un humor bastante excesivo. No me ha parecido la típica sumisa incapaz de saltar a la primera de cambio, ésta salta y entonces es cuando la lía. Lo que hace ver al lector lo humanos que somos. Y eso sí que me ha gustado. Obviamente, no el hecho de ver cómo pisotean y humillan a una mujer, mostrando lo inútil que es (sarcasmo puro y duro, por si no lo habéis pillado con la cursiva) mediante exigencias, sino ver que somos capaces de cometer errores y no hundirnos en ellos, siendo capaces de salir a flote.
Hubo una escena que me encantó, que representa ese momento en que te dan ganas de mandarlo todo por ahí. Es super divertida y fue la parte que más amena se me hizo.
Respecto a los personajes he de destacar a tres: el señor Saito, el señor Haneda y a Fubuki. El señor Saito y la señorita Mori, Fubuki, son la representación de cómo el poder puede convertir a las personas en algo horrible; la diferencia es que Fubuki es mala y cruel de por sí y el señor Saito va evolucionando para bien a lo largo de la novela. Respecto a Haneda, que es el director de la empresa, me ha parecido un buen hombre, representa lo humano, alguien no ambicioso que hace el bien. Algo que resulta bastante irónico y a la vez sorprendente en el escalafón social.
El punto fuerte de la novela es la crítica a la sociedad japonesa, una crítica que me ha parecido demasiado exagerada, ya que pone a los japoneses como unos ambiciosos a los que les gusta humillar a las mujeres y que odian a los occidentales. No he estado en Japón, pero tampoco creo que sea para tanto...
En conclusión, Estupor y temblores es una novela corta con unos personajes con los que no he conectado demasiado bien, una crítica exagerada hacia la sociedad japonesa y una trama repetitiva y aburrida.
¿Y vosotros? ¿Lo habéis leído? ¡Contadme!