Autoras: Iria G. Parente y Selene M. Pascual
Saga: El orgullo del dragón
Editorial: Nocturna
Nº págs: 664
ISBN: 9788417834579
¡Lo quiero!
Tras el asesinato de uno de los suyos, Viria decide atacar Gineyka y conquistarla de una vez por todas. Lo que no espera es que Gineyka esté preparada y también ansié venganza El conflicto arrastra a todo el mundo en ambas tierras: Via y Neith se encuentran alistados en el ejército contra su voluntad , mientras que Irati Burgoa lucha por la memoria de una amiga perdida; su hermano Saroi, en cambio, solo quiere huir de la mansión vicepresidencial, tanto como Arabella Medici del convento donde le han recluido. Por su parte, Eider Heizea ha comenzado a perder cualquier ápice de esperanza... Al igual que Aurora Solari, que se limita a ver los días pasar. Mientras la guerra entre la nación del dragón y la del unicornio estalla, la Muerte observa y se pregunta cuántas víctimas se cobrará.
"Viria y Gineyka eran iguales. Eran diametralmente opuestas, pero exactamente iguales". Esta frase sacada del propio libro es la descripción perfecta de lo que intentan explicarnos las autoras. Ambas sociedades son injustas, ambas sociedades están podridas; aunque no tengan nada más en común. Cada frase, cada intervención, cada párrafo de este libro es una carta dirigida a todas esas personas que necesitan abrir los ojos para ver las injusticias que se producen en este mundo injusto y desigual. Fuera de esto, fuera de la declaración de los ideales de estas autoras (que yo comparto), los personajes y la historia no solo aportan a explicar estas ideas sino que también se te quedan clavados en el corazón.
Neith y Via siguen siendo, sin duda, mis personajes favoritos de la biología. Forman una de las parejas más compensadas que he leído en mucho tiempo. Neith con las ideas claras y con intención de sobrevivir a todo, Via dulce y pérdido; pero a la vez valiente y fuerte. Se complementan, se quieren y se mantendrán juntos. Siempre.
Eider y Saroi tienen todo en contra. En un mundo que no aprecia quienes son o lo que sienten, solo ellos se entienden y solo ellos podrán ser la salvación del otro. Tras los acontecimientos del primer libro, ambos jóvenes solo quieren que el otro se quede a su lado, pero no saben cómo hacerlo. Eider necesita encontrar su fuerza interior y Saroi necesita recuperar su voz.
Irati y León han sido toda una sorpresa para mí. Ambos han crecido en el privilegio. León como hombre blanco criado en Viria lo ha tenido relativamente fácil para alcanzar sus metas. Irati como mujer negra criada en Gineyka sabe que puede llegar a dónde quiera. Sin embargo, ambos están dispuestos a luchar por un mundo más justo porque "cuando te das cuenta de que [la vida] solo es fácil para ti..., todo empieza a ser más complicado y no vuelve a ser tan fácil nunca más".
Quizás el personaje al que más he odiado y, a la vez, he entendido hasta límites insospechados es a Alexis. Ella solo quiere un hogar, un hogar que la acepte y la respete y está dispuesta a todo para conseguirlo. Esto le hace tomar decisiones muy cuestionables. Por último, Muerte está ahí siempre presente, dispuesta a demostrar que da igual quién seas. Muerte siempre gana.
Solo quiero terminar esta larga reseña con una de las mejores reflexiones del libro: "La raza no era sino una de las muchas razones de la opresión. Pero no la única".
¿Qué os ha parecido? ¿Le daréis una oportunidad? Todo en comentarios y nos vemos en el próximo post.