Saga: Autoconclusivo (sin traducir)
Género: Contemporáneo/ Poesía
Sinopsis: Un cañón. Una correa./Una pieza. Una galleta./Un quemador. Un calentador./Un helicóptero. Una pistola./Un martillo/Una herramienta para la REGLA. O, puedes llamarlo un arma. Eso es lo que el quinceañero Will ha metido en la cintura trasera de sus vaqueros. Verás, su hermano Shawn acaba de ser asesinado. Y Will conoce las reglas. No llorar. Nada de chivarse. Venganza. Ahí es donde Will se dirige ahora, con esa pistola metida en la cintura trasera de sus vaqueros, la pistola que era la de su hermano. Se sube al ascensor, séptimo piso, drogado. Sabe a quién busca. ¿O no?
Simplemente increíble. De verdad que si sabéis inglés (relativamente básico) tenéis que leer este libro porque merece mucho la pena. Creo que el verso es el formato perfecto para esta historia porque llega mucho más que la prosa. Además, hace que la lectura sea muy rápida y creo que este libro es para que se lea en un par de horas y sientas la inmediatez de la situación de Will.
Acaban de asesinar al hermano de Will. Sabe que tiene que seguir tres simples normas: no llorar, no chivarse, vengarse. Esas han sido siempre las normas en su barrio y seguirán siendo así para siempre. Will lo sabe. Will sabe que tiene que matar al asesino de su hermano. Coge la pistola, se mete en el ascensor y baja a la entrada de su edificio. Pero en cada piso sube alguien, alguien de su vida que ya ha muerto para contarle la verdad de su historia.
En esta novela no hay una gran acción, pero si una gran caracterización del personaje de Will. Will es joven, ama a su hermano y solo conoce lo que le han contado. Por eso actúa como actúa, por eso cree que su deber es vengar a su hermano. Sin embargo, no está del todo convencido. Pero las normas son las normas y tiene que hacerlo. Me ha fascinado como el autor ha conseguido reflejar las dudas de este joven a través de sus versos.
Pero la historia de Will no es solo la historia de Will. Es la historia de muchos barrios donde la violencia es el pan de cada día, donde los niños solo conocen las normas de las bandas, donde tirotean en parques infantiles, donde las venganzas están a la orden del día, donde la policía no actúa. Esta es la historia de toda esa gente en todos esos barrios que viven con miedo. Es la historia de todos esos niños que saben reaccionar mejor a un tiroteo que a una muestra de cariño de sus vecinos. Es la realidad de muchos barrios de Estados Unidos.
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