Opinión Personal:
Y me ha defraudado bastante. Es una historia que empieza a coger ritmo a partir de la mitad del libro y la primera parte se mueve muy lento, me ha resultado muy pesada y me ha costado un poco cogerle el ritmo, a punto estuve de dejar la biología sin terminar porque la sensación que tenía sobre ella era igual que otros libros de Beta.
En este segundo libro conoceremos el avance de los personajes, cómo avanza sus historias a paso lento pero decidido. Y en muchas ocasiones más que una novela romántica me ha parecido un libro de autoayuda. Demasiadas reflexiones, demasiados pensamientos, demasiadas explicaciones, demasiados “demasiados”. En este libro, igual que el primero, hay capítulos que se alternan contándolo Macarena como Leo y en esta ocasión Leo tiene más capítulos narrados desde su punto de vista que en “Fuimos canciones”, lo que me encanta porque ya iba pidiendo saber más de él.
Hay algunas partes que me han divertido y otras que he querido pasar rápido porque me resultaban un coñazo. El final es lo esperado desde que empieza a desarrollarse lo interesante a partir del medio libro. Así que no había gracia alguna. Esperaba algún giro sorprendente de la historia, algo que también fuese una historia real de la gente de la calle, que no todo acaba siempre (tristemente) con: y fueron felices y comieron perdices.