Reseña, acuario con peces rojos

Publicado el 30 septiembre 2016 por Nosololeo

ANANTES


   Después de diversas novelas y relatos, la escritora española Carmen de la Rosa, ve salir al mercado su última obra “Acuario con peces rojos
En el verano de 1981 el Américo Vespucio atracaba en el puerto de Málaga procedente de México portando consigo un Matisse y un misterio: el de la desaparición durante la travesía de Olvido y Miranda Ortiz de Peñarroya, propietarias de un valioso cuadro que ha pertenecido a su familia durante varias generaciones
Así es como comienza esta historia, con la desaparición de dos mujeres que viajaban con un valioso cuadro. Años después Vita y su madre están interesadas en reconstruir los sucesos para lograr descubrir que es lo que aconteció. La escritora utiliza eso unido al rastreo de los diferentes propietarios de “El acuario con peces rojos” para plasmar la historia de una familia durante varias generaciones a través de las cartas entre diferentes miembros de la misma. Conoceremos todos los trapos sucios y sucesos, en la mayor parte traumáticos y difíciles de sobrellevar, por los que ha tenido que pasar los Ortiz de Peñarroya.
Para entrelazar las diversas historias, la escritora va saltando en el tiempo de uno a otro lado, encajando los dos momentos temporales con gran acierto. De hecho, Vita va descubriendo los secretos más escabrosos de su familia a través de las historias que le va contando su madre a medida que ésta va organizando la correspondencia de diferentes antepasados, al igual que Sherezade, una historia por día, un secreto descubierto en cada historia.
Vita es un eslabón crucial, el elemento que unirá el presente y el pasado. En realidad la trama se desarrolla en torno a su vida y las personas que le rodean. Ella será la que nos relate el estropicio que su abuela ha generado desde el mismo momento que se ha ido a vivir con ella, así nosotros nos echaremos unas risas con las ideas locas que se le ocurren a Guadalupe, una carismática mujer que despertará nuestras simpatías. Vita también será quien escuche embelesada lo que tiene para contarle su madre, que ha decido llevar a cabo una recopilación de los momentos más importantes en su familia.
Sin duda hay que destacar la capacidad de Carmen, que en tan pocas páginas ha logrado crear una imagen tan creíble y cercana de las mujeres Ortiz. A través de sus vivencias las conoceremos perfectamente, perfilando sus caracteres y disfrutando con lo que la vida les tiene preparado.
Nada queda perennemente enterrado y con el paso del tiempo saldrán a relucir las penurias, infelicidades y alguna que otra alegría del pasado de la familia de Vita. La escritora, va haciendo malabares para cambiar de tiempo sin perder la intriga y motivando al lector por seguir leyendo. Una miríada de personajes entrañables. Una familia matriarcal en el que el peso de la mujer es importante, ya que en realidad la trama se desarrolla a través de sus vivencias y desencuentros. El pasado lleno de sombras y misterios. El presente de risas, frustraciones y ganas de seguir hacia delante. Y entre medias muchos secretos por descubrir. Un relato corto, ameno, perfectamente hilado, con unos personajes de excepción.