es otro de esos libros que recordamos de la biblioteca del colegio. Está escrito por Consuelo Armijo. (Este libro forma parte del Aniceto, el vencecanguelos Reto 25 Españoles y Reto libros olvidados.)
¡Vaya que si tenía canguelos el bueno de Aniceto! ¡La mar de cangelos: que si el dragón, que si el bosque, que si la tía Carmen y el tío Leopoldo, que si el Parrisclisclás...! Y la rata de dos patas, y lo de Miguel el tramposo, y lo de la cera... Pero Aniceto es un vencecanguelos, y un vencedificultades, y poco a poco se va dando cuenta de que, haciéndole frente, no es tan fiero el león como lo pintan. "La vida es un juego en el que, a veces, se tiene mala suerte. ¡Pero hay que seguir jugando!