Reseña: Ànima d’acer

Publicado el 03 agosto 2019 por Ana Escudero @_AnaEscudero

Esta es la historia de María, una mujer valiente, independiente y apasionada nacida durante la segunda década del siglo XX y también la de su madre, Blanca, una cantante lírica, ambiciosa y egoísta que anhela por encima de todo ser una gran estrella, deseo que se trunca cuando queda embarazada. Un terrible incidente, sin embargo, le pone en bandeja la posibilidad de cambiar para siempre su situación y eliminar a quien más odia: su marido.

Cuando María se hace mayor se aleja tanto como puede del hogar materno y gracias a un curioso testamento se convierte en dueña de su vida hasta que un día el pasado llama a la puerta. Su espíritu aventurero, la curiosidad y la Rita, su mejor amiga, la empujan a buscar respuestas y descubre que lo que cree perdido se esconde muy cerca envuelto por un secreto. Los años pasan y los retos se acumulan. Alegrías, llantos, preguntas, misterios y la necesidad de sobrevivir modelan su talante y entonces, cuando menos se lo espera, los fantasmas vuelven y revelan la verdad.

Es un relato lleno de coraje, tenacidad, superación, odio y amor.

Reseña 146. Hace una semana reseñé por primera vez una novela escrita en catalán. Hoy le llega el turno a " Ànima d'acer ", como podéis deducir por el título, escrita en catalán por su autora, Anna Casamitjana i Costa.

No voy a explicar extensamente la trama de la novela, creo que la sinopsis ya da una idea bastante acertada de lo que el lector puede encontrar: alegrias, llantos, misterios... Pero sí que voy a hablar de lo que yo he sentido al leerla y de sus personajes, porque es una novela más de personajes que de ambientación o sucesos.

Cuando leía la novela me di cuenta de que es una novela de mujeres. Ellas son las que llevan la voz cantante, las que manejan el cotarro, las que llevan el peso de todo lo que se narra. No es que no haya personajes masculinos con interés en la novela, pero en su mayoría quedan a la sombra de las feminas, mujeres luchadoras, fuertes, calculadoras, frías, buenas, con mala suerte... Así escrito parece que todas sean cortadas por el mismo patrón, pero no.

Por un lado destaca Blanca, fría y calculadora, que desea triunfar en la ópera. Es de esas personas que aprovecha cualquier oportunidad para conseguir lo que desea a costa de todo y de todos. A cada escena que aparece se vuelve más fría y egoista, pero a la vez es un personaje fascinante, como siempre fascinan los malos si están bien construidos.

María es su hija. Una persona luchadora que ha sufrido desde su infancia, es la antitesís de Blanca. Amable, trabajadora e independiente que sabe lo que quiere, pero que también sabe como no quiere conseguirlo, sabe que no quiere emular a su madre.

La primera parte de la novela está centrada en Blanca, en una Blanca reina de corazones. Ella acapará toda la atención mientras a su alrededor suceden acontecimientos históricos de la primera mitad del siglo XX.

La segunda se centra en María, ya adulta. De repente, la novela se transforma y asistimos a la evolución de Maria mientras que Blanca casi desaparece de escena, y realmente sentí su falta, me faltó alguna escena más.

Anna Casamitjana ha escrito una novela que emociona a la vez que intriga al lector. Es una novela de sentimientos que consigue atrapar al lector sin aburrirlo. Yo he disfrutado con su lectura y me he enamorado de Blanca, ¡es tan egoísta!