Daddy’s Girl: The Big Payback (#1)
A. J. Launders
Cuando uno hace estas pequeñas maratones de historias cortas gratuitas adquiridas en Amazon, tarde o temprano se tiene que encontrar con algo que le sorprenda gratamente. Este ha sido el caso de Daddy’s Girl: The Big Payback escrito por A. J. Launders. La verdad es que he de reconocer que es el que más miedo me daba, por aquello de ser sexo vengativo entre una persona de mediana edad y una joven que acaba de cumplir la mayoría de edad. Pero no es en absoluto lo que me esperaba.
Una vez más me encuentro ante una historia escrita en primera persona y de la cual no sé el nombre de su protagonista. En esta ocasión viajamos por este relato corto de la mano del protagonista: hombre maduro de cuarenta y pocos. La joven con la que se acuesta, Ali, es la hija de su mejor amigo. O mejor dicho, de su mejor ex-amigo. La relación entre ambos se rompió cuando Drew se acostó con la mujer del protagonista.
Toda la historia reside en las ansias de venganza que tiene nuestro anónimo protagonista. Así que se le ocurre la feliz idea de seducir sutilmente a la hija de Drew para luego tener una buena sesión de sexo con ella. Es una extraña venganza, pero oye… si es lo único que se le ha ocurrido, no se lo voy a criticar. Ali siempre se había insinuado al protagonista, pero éste la ignoraba por respeto a la amistad con su padre. La verdad es que la parte de seducción y artimañas para terminar juntos en la cama es bastante entretenida de leer.
Además, la escena de sexo no es en absoluto cafre. Ya me temía yo una pseudoviolación o algo por el estilo. Al fin y al cabo, todo aquello era para vengarse de Drew. Pero no, el protagonista es bastante considerado y se asegura de que Ali tenga una buena experiencia.
Pero lo mejor de este libro es el final. Esa sorpresa del último par de líneas que deja al lector con la boca abierta. Yo personalmente no me lo esperaba en absoluto y me ha encantado. Esa puntada final (de la que no diré nada para no estropeárselo a nadie) añade una nueva dimensión al resto del libro.
Una buena experiencia que demuestra que los libros de erótica pueden ser, y deben ser, algo más que una recopilación sin tapujos de escenas de sexo.