Nnedi Okorafor es una de las principales exponentes del afrofuturismo, una corriente artística que engloba varias artes y que tiene como objeto reivindicar las tradiciones africanas y su forma de ver el mundo.
La autora lo hace esta vez con Bruja Akata (Nocturna Ediciones), pero sus temas ya estaban presentes en Quién teme a la muerte, cuya reseña podéis leer aquí. En ambas novelas se habla de magia, de maestros que sólo aceptan a alumnos dignos y de la camaradería con la mejor forma de resolver los problemas. Pero también toca de fondo otros problemas más comunes, como es la falta de integración que sufren los alumnos africanos o el peligro añadido que corren los albinos.
Sunny Nwaze es nigeriana, pero vive en Chicago con su familia. Una noche, presencia en la llama de una vela el fin del mundo. Al poco tiempo, la familia regresa a Nigeria. Como procede de Estados Unidos, es albina y de la etnia igbo, en el colegio no termina de encajar y la suelen llamar bruja akata, que es un término despectivo para designar a personas afroamericanas que nacen en el extranjero.
Pero no todo es malo. Poco a poco, diversas manifestaciones le dan a entender a Sunny que es una persona leopardo y un sujeto independiente. Puede hacer magia, pero sujeta a unas reglas y no puede dañar a nadie. Sería más sencillo si tuviera algún referente, pero sus padres no quieren oír hablar del tema, ni tampoco hablan de su misteriosa abuela, por donde puede haberle venido el don. Lo único que se espera de ella, como mujer, es que estudie y se pueda casar pronto. Ni siquiera puede jugar al fútbol con sus hermanos, porque no se considera femenino.
Y por si fuera poco, apenas puede salir. Un asesino llamado Sombrero Negro Otokoto está secuestrando niños. Poco a poco aprenderá a escabullirse con sus amigos y a iniciar su aprendizaje en el sendero de la magia, aunque esto pueda complicarle un poco la vida.
De nuevo Okorafor consigue envolvernos con su prosa hipnótica en una novela de aprendizaje, donde de la mano de los cuatro amigos veremos los peligros físicos y místicos a los que se enfrentan los esudiantes de magia y su separación con los borregos (los que no practican magia, que serían como los muggles del Potterverso). Pero de fondo hay toda una reivindicación hacia el rol de la mujer en la sociedad, sobre lo que puede o no puede hacer, ya sea con magia o sin ella.
Una novela muy entretenida, calificada como juvenil, pero de la que disfrutarán también los adultos. Es la primera de una saga, así que tendremos Sunny para rato. La traducción es de Carla Bataller Estruch.