“El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas”, otro imprescindible de Murakami
Haruki Murakami ha vuelto a conseguirlo. Cuando ya pensaba que no podría leer nada sorprendente de este escritor japonés, va y me deja fascinada con “El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas” y mira que, desde que lo descubrí el año pasado, ya llevo bastante de su extensa bibliografía a mis espaldas. Si te gusta Murakami, no puedes dejar de leer mi reseña de uno de sus libros imprescindibles.
“El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas” no cuenta una historia, sino dos, aunque conectadas de una manera sorprendente como el lector descubre en la última parte de este peculiar libro. Por un lado tenemos la historia de un anónimo narrador que, por motivos desconocidos, se ve impelido a vivir en una extraña ciudad en la que trabajará como lector de sueños contenidos en los cráneos de unas criaturas similares a unicornios. Además de tener que dejar atrás a su sombra, el hombre debe pagar un alto precio por quedarse en este tranquilo lugar en el que sus habitantes acaban perdiendo el corazón. Esta misteriosa ciudad se llama El fin del mundo y está rodeada por una muralla impenetrable que no sólo retiene a sus habitantes tras sus muros, sino que también parece mantener alejados los recuerdos de sus vidas anteriores.
La otra historia nos sitúa en un Tokio futurista, en el que el protagonista trabaja como calculador para el gobierno, debido a su potencial para modificar y procesar ciertos datos. Lleva una vida tranquila y humilde hasta que recibe el encargo de un científico relacionado con su asombrosa capacidad para calcular, un trabajo que lo lleva a enfrentarse a diversos peligros que deberá sortear para comprender realmente qué le ocurre y para evitar que la especie de despiadado país de las maravillas en el que vive llegue a su fin.
Las dos historias aparecen intercaladas y ambas se van poniendo más interesantes conforme avanza la trama, sobre todo cuando el lector empieza a vislumbrar los paralelismos y nexos de unión entre ambas. De nuevo vemos en “El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas” el sello característico de Murakami, sobre todo en lo referente a su profundo análisis psicológico de sus personajes, terriblemente humanizados al quedar de manifiesto sus gustos, miedos, manías, rarezas y pensamientos. Por supuesto, el toque misterioso y el surrealismo en grandes dosis no faltan en este digno libro de su autor, pero parece que esta vez el escritor inserta bastante más acción, e incluso aventuras, que en el resto de su obra. Y es que este libro resulta más dinámico que otros que he leído de Haruki Murakami sin perder en ningún momento el halo de misterio que envuelve a ambas historias, sobre todo la situada en la ciudad del fin del mundo, mi preferida de las dos.
Con respecto al final, por supuesto no voy a hablar para no hacer ningún spoiler a nadie, pero considero que es uno de los mejores de este escritor, y me encanta cómo quedan conectadas las dos historias. Por todo lo que he comentado y muchas cosas más que seguro me dejo en el tintero, creo que “El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas” es una auténtica obra maestra de mi querido Murakami, a la que no faltan las acostumbradas referencias culturales del autor (sobre todo en lo concerniente a música y literatura) que todo fan de este escritor debe leer sin excepción y que tampoco es un mal libro para iniciarse en la curiosa obra del japonés.
Por cierto, que ahora incluyo a este libro en mi “Top five Murakami” junto con la trilogía “1Q84”, “Crónica del pájaro que da cuerda al mundo”, “Kafka en la orilla” y “Los años de peregrinación del chico sin color”. Con eso te lo digo todo…
Y tú ¿Has leído “El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas”?¿Qué te parece este libro? ¿Cuán es tu particular “Top five Murakami”? Cuéntame…