Reseña de "Exhalación" de Ted Chiang

Publicado el 16 septiembre 2020 por Rt

Los que leéis el blog con asiduidad, sabréis que me gusta la Ciencia Ficción más humana, menos técnicas, que cuente historias universales que aborden temáticas terrestres, pese a estar ambientadas en otros planetas y galaxias.


Exhalación (Editorial Sexto Piso) tiene relatos de Ciencia Ficción notablemente buenos, algunos de los cuales te vuelan la cabeza. Usan los mecanismos de una humanidad aparentemente avanzada para analizar los temas universales que siempre nos han preocupado, como la muerte, la eternidad, el deseo de perdudar. etc.

Son nueve relatos en los que podemos observar una puertas temporales, que aparecen en un pueblo lejano con aire de las Mil y una noches, en las que se puede viajar al pasado y al futuro. Un juguete inofensivo que en realidad nos hace cuestionarnos el libre albedrío. Un prisma es capaz de replicar versiones de nosotros mismos con las que podemos interactuar y ver cómo realizan los sueños que nosotros hemos sido incapaces de cumplir. Una mascota virtual desarrollada durante décadas se encuentra a punto de adquirir libertad sexual. ¿Son lícitas las relaciones entre humanos y robots? (Algo parecido a los kentukis) ¿Y pueden los robots cuidar de nuestros hijos? Una arqueóloga creyente pierde la fe. etc.


Son temas muy ricos. Algunos, como el de los viajes en el tiempo ha sido explorado hasta la saciedad. Pero Ted Chiang consigue darle un estilo diferente e innovar de algún modo en un género tan complejo. También aborda temas filosóficos, como en el relato en el que la Humanidad crea un artefacto que acumula absolutamente todos nuestros recuerdos, haciendo imposible el olvido. ¿Cómo afecta esto al perdón? ¿Se puede pasar página y seguir con nuestra vida cuando podemos mortificarnos una y otra vez en el daño recibido?

Algunos de estos temas ya habían sido tratados por Philiph K. Dick o incluso en la serie Black Mirror, pero este nuevo tratamiento supone una bocanada de aire fresco para un género narrativo que ha demostrado que va más allá de las naves espaciales y de la colonización de planetas, centrándose en tramas cercanas y mostrando problemas del día a día. Esta clase de Ciencia Ficción "cercana" se agradece en una época en la que las peores pesadillas de la humanidad van tomando forma a pasos agigantados.
Y al final, para darle más interés al libro, el autor nos cuenta de dónde proceden algunas de sus historias. La traducción de Rubén Martínez Giráldez es magistral. Un gran libro sobre el que reflexionar y dejarnos asombrar. Un libro poderoso.

"El universo comenzó como una enorme bocanada de aliento contenido. Quién sabe por qué, pero sea cual sea la razón, me alegro de que así fuera, porque debo mi existencia a ese hecho. Todos mis deseos y reflexiones no son ni más ni menos que remolinos generados por la exhalación paulatina de nuestro universo. Y hasta el momento en que esta gran exhalación termine, mis pensamientos proseguirán"