Reseña de "Guía del club de lectura para matar vampiros" de Grady Hendrix

Publicado el 01 enero 2022 por Rt

Aunque el género de vampiros parece agotarse y las repeticiones intentan convencernos de que está todo dicho, de vez en cuando hya sorpresas frescas y agrabables que nos demuestran que aunque prácticamente se haya dicho todo sobre vampiros, hay incontables formas de decirlo. 


Guía del club de lectura para matar vampiros (Editorial Minotauro) es un libro divertido, pero que no oculta el horror de que un vampiro se haya instalado en un vecindario americano típico, de clase media alta. Algo así como mezcláramos Mujeres desesperadas con Noche de miedo. 

Patricia Campbell es ama de casa, aunque trabajó como enfermera hasta casarse. Sus días transcurren entre llevar a sus hijos adolescentes al colegio, al entrenamiento de fútbol y a todo cuanto necesiten. Su marido pasa muchas horas en el trabajo buscando un ascenso en el departamento de Psiquiatría. Y su suegra senil se ha ido a vivir con ellos. El único consuelo que tiene en su vida es el club de lectura, que se celebra una vez al mes con otras amas de casas y donde leen libros (cuanto más truculentos mejor) para comentarlos. 

Una noche, precisamente saliendo de una reunión del club, Patricia es atacada por su anciana vecina. Este hecho desafortunado la lleva a conocer a su sobrino James Harris, un hombre que ha viajado, leído y vivido mucho y por el que Patricia no puede evitar sentir cierta simpatía. 

No obstante, cuando en uno de los barrios pobres de la ciudad comienzan a desaparecer niños, todo el mundo se vuelve paranoico y Patricia sospecha de su nuevo y atractivo vecino. Con ayuda del club de lectura empezarán a estudiar su comportamiento e intentarán reunir pruebas para presentárselas a la policía, a pesar de que sus maridos son muy amigos de James. 

Y esta es una de las principales lecciones del libro: aparte del vampirismo, se trata de una historia de sororidad en la que las mujeres entienden que los hombres triunfan porque permanecen unidos y que las mujeres deben hacer lo mismo, superando barreras generacionales con la propia familia. 

También está presente una gran crítica social. Los periódicos no se
ocupan todo lo que debiera de las desapariciones de niños porque es un barrio de mayoría negra. 

A pesar de todo esto, el libro tiene ramalazos de cierto humor negro, pero que esconde una amenaza muy, muy real. Patricia, cada vez más aislada, deberá convencer al mundo de algo que a priori parece imposible. Y deberá darse prisa antes de que desaparezcan más niños o haya más ataques. Una novela apasionante que te mantiene leyendo hasta acabarla, en la que Grady Hendrix crea unos personajes creíbles y una vida de clase alta que no es tan maravillosa como pueda parecer. 

¡Feliz Año a todxs. Que tengáis muchas lecturas y que sean buenas!