Raku es tranquilo, excelente cocinero, noble y tierno. Chitoge es agresiva, golpea a los chicos y gusta de las películas violentas. Lo único que los une es que ambos ¡son hijos de poderosos jefes yakuzas! Por eso, para evitar una guerra entre los grupos rivales, sus padres los obligarán a ser novios durante tres largos años. Si no se soportan entre ellos y ni siquiera pueden ser amigos, ¿lograrán aparentar amor y convencer a los furiosos gánsteres de que una alianza es posible?
Mientras Raku espera a esa chica conoce a Chitoge Kirisaki. Una chica enérgica, grosera y violenta que desde el primer momento lo detestara por ser una persona “débil”. Para desgracia de Raku y Chitoge sus padres, son los jefes de dos bandas de mafiosos y para evitar la guerra entre ellos tendrán que fingir que son novios para que todos los miembros de las bandas no peleen entre ellos.
Debo confesar que hasta que Panini anuncio este manga no lo conocía de nada, pero al leer la sinopsis y ver que dos bandas de mafiosos se unían por una relación de un par de adolescentes me llamo mucho la atención, así que entré en el sin esperar absolutamente nada y para mi sorpresa encontré una historia de verdad divertida.
Otra cosa que me gustó mucho de este tomo, es que a pesar de ser el primero del manga no comienza de una manera lenta como casi todos los mangas que he leído, sino que se inició duro y directo con la historia.Sobre los dibujos puedo decir que resultan claros y estéticos y combinan muy bien con el tipo de historia.