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Reseña de “Metro 2033” de Dmitry Glukhovsky: cuando la humanidad se refugia en el metro para sobrevivir

Publicado el 13 junio 2019 por Rous85
Reseña de “Metro 2033” de Dmitry Glukhovsky: cuando la humanidad se refugia en el metro para sobrevivir

“Metro 2033” de, Dmitry Glukhovsky es toda una referencia de la ciencia ficción rusa por muchos motivos

“Metro 2033” de Dmitry Glukhovsky es una fabulosa distopía de ciencia ficción rusa que me ha maravillado de principio a fin. He estado un par de años (desde que alguien me recomendó este primer libro que inicia una exitosa trilogía) aplazando su lectura y me alegro de finalmente haberle dado una oportunidad a esta historia que tiene todos los ingredientes para fascinar a los amantes del género. ¡Quédate a conocer más!

Dmitry Glukhovsky (vaya nombre) es el autor de “Metro 2033” uno de los libros de ficción más originales y mejor hilados que he leído nunca. Aunque tenía las expectativas bien altas, debo reconocer que esta obra me ha parecido mejor de lo que esperaba, porque me ha tenido en tensión todo el tiempo a la vez que me ha admirado lo perfecto de su trama y estructura. Este libro distópico presenta a una humanidad superviviente de una guerra nuclear que se ha refugiado en los túneles del metro de Moscú para huir de la radiación, las condiciones climáticas adversas y las criaturas mutantes que pululan por el exterior. Después de décadas de habitar los subterráneos, los seres humanos han creado una sociedad con sus propias reglas y sistemas y basada en una especie de ciudades estado, dependiendo de las distintas estaciones y las facciones que han ido surgiendo en función de distintas ideologías (comunistas, neonazis, sectas religiosas, etc.). Artyom, el joven protagonista, lleva desde los 3 años viviendo en una de las estaciones de metro, desde que su padre adoptivo lo salvara de las garras de una peligrosa plaga de ratas. Pero un buen día recibe el encargo de un curioso personaje llamado “el cazador” de viajar a la Polis, una especie de ciudad subterránea, con una extraña misión. Artyom, que siente que debe hacer algo grande y quiere vivir aventuras, se pone en camino, pero poco imagina que su viaje estará lleno de peligros y situaciones rocambolescas que le harán plantearse muchas cosas y cuestionarse continuamente el sentido de la vida.

Como ya he dicho, este libro es altamente adictivo. No sólo por lo original de su trama y lo perfectamente que está narrado, también por las dosis de acción y misterio que abundan en sus páginas y por lo bien que el autor pone sobre el tapete la condición humana, llevada a sus últimas consecuencias en una situación límite. Así, en este libro subyace una gran crítica social, poniendo de manifiesto de lo que es capaz el hombre cuando la locura y el miedo empiezan a ganarle terreno a la razón. La lectura de “Metro 2033” es en casi todo momento asfixiante y claustrofóbica, además de sumamente oscura, poniendo al lector en la piel de unos personajes que no saben qué les espera detrás de la próxima curva, en un mundo en el que las ratas, los seres mutantes y el propio ser humano se convierten en un peligro que acecha constantemente. También me resulta magistral cómo el autor propone una especie de reinicio de la humanidad que supone, incluso, la creación de nuevos mitos para explicar su peculiar situación, con una religión inventada y adoradora del llamado “Gran gusano” llena de adeptos a su fanática causa. Así, este libro a pesar de su trama ficticia y de presentar cuestiones que están basadas en la pura fantasía y no en las teorías genéticas o evolutivas reales en lo que respecta a las mutaciones o en la forma de supervivencia, sí que tiene trazas de verosimilitud al explorar tan bien la condición del ser humano.

Metro 2033” es un libro que debes leer si te gusta la ciencia ficción, porque creo que es un ejemplo perfecto de lo que una distopía debe ser. Me parece que es la primera vez que leo algo de este género de procedencia rusa y la verdad es que estoy empezando a plantearme buscar más títulos de ciencia ficción rusa, porque me ha impactado para bien. Eso sí, antes tendré que leer las dos secuelas publicadas por Dmitry Glukhovsky (en serio, vaya nombre) y que creo que están ambientadas en los años posteriores a la primera entrega: “Metro 2034” y “Metro 2035”. Me parece que no tardaré demasiado en leer estos libros y puede que pronto tengas también sus reseñas por aquí.

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