Reseña de "Nuestra parte de noche" de Mariana Enriquez

Publicado el 02 mayo 2020 por Rt
Juan y su hijo viajan en coche por territorios argentinos tras la dictadura militar. Van a visitar a los abuelos del chico tras el fallecimiento de la madre. Hasta ahí todo es más o menos normal. 
Juan está enfermo del corazón, tiene varias operaciones a sus espaldas y cada día se encuentra más débil. Poco a poco nos enteramos además de que Juan es uno de los mejores médiums que ha habido nunca, capaz de invocar a la propia Oscuridad, una entidad maligna alrededor de la cual se ha formado una secta. Y cuya sede se encuentra precisamente en la finca de sus suegros. 
En esta secta están involucradas muchas de las personas más relevantes de la Argentina militar, la del golpe de Estado. Buscan alcanzar esa Oscuridad, una entidad informe y caprichosa que se puede manifestar en cualquier lugar. Sólo los mejores médiums pueden convocarla, y ante el debilitamiento progresivo de Juan, su hijo se perfila como su sucesor. Pero ni el niño ni su padre quieren eso para él.

Nuestra parte de noche (Editorial Anagrama) es una novela sobre la maldad absoluta, sobre la capacidad de redención y sobre el futuro. Narra la historia desde varios puntos de vista y combina varios narradores: Juan, Gaspar(el niño) y la madre fallecida. Esta novela trata además unos temas evidentes y otros mucho más sutiles, como la necesidad de romper las maldiciones familiares para ser libre, el amor, la amistad de juventud, etc. 
Ya habíamos hablado aquí de esta autora argentina, ya que su libro Las cosas que perdimos en el fuego dio mucho que hablar hace unos años. De hecho, uno de sus relatos, el que versa sobre una casa abandonada, presenta un escenario de gran importancia en esta novela. 
Cuando yo leo literatura femenina real desde Emily Brönte hasta Virginia Woolf, Catherine Mansfield, Carson McCullers son todas perversas. Todas hablan de cosas sumamente oscuras, tienen una relación con la sexualidad y con el cuerpo que es brutal, cruel, en algunos casos. 

El libro bebe de fuentes como Clive Barker, Stephen King, H.P. Lovecraft y las leyendas urbanas. Pero tiene un poso de originalidad, una capacidad increíble para mostrar a media luz y de forma sutil lugares en los que se quiere estar y a la vez no.