RESEÑA DISCO BLACK STONE CHERRY “Black to Blues” (EP, Mascot Records, 2017)

 Riffazo de introducción y vamos que nos vamos, al grano. Vaya forma de presentar el EP tienen la banda, absolutamente contundente. Guitarra, bajo, batería y teclados sirven apra arropar la voz de Chris Robertson en su faceta de vocalista. El primer tema, “Built for Comfort” (Howlin’ Wolf) es un auténtico leñazo con un desarrollo y un solo de guitarra hacia la mitad del tema con clara vocación de jam – band. Y es así, este EP en el que tributan sus temas favoritos se muestra como un divertimento de una banda consolidada a la que le apetece hacer buena música, efectiva y sin más complicaciones ni trascendencias. Un buen puñado de versiones que hacen suyas para entretenerse y demostrar que siguen ahí. No todo iba a ser cine de autor, las palomitas también tienen lo suyo.

Sin perdernos mucho más, decir que al tema introductorio le siguen “Champagne & Reefer” (Muddy Waters), con la misma intención jam y la misma intensidad sonora. “Palace of the King” (Don Nix, Donald Dunn y Leon Russell) y “Hoochie Coochie Man” (Willie Dixon) le siguen a la zaga, con un sonido absolutamente directo. Grabado y concebido sin lugar a dudas para añadirlo sobre las tablas a su propio repertorio, cosa que también se agradece. Cierran el álbum con “Born Under a Bad Sign” (Booker, T. Jones y William Bell) y con “I Want to Be Loved” (Willie Dixon de nuevo), un broche a lo boogie que como decimos, debe tener un directo de órdago.

Lo dicho, el disco suena bien, entretiene, tiene la producción justa, sin esos excesos que hoy día tanto abundan y te hace pasar un buen rato, sin más complicaciones.

Bourbon & Blues  (7/10).

Nacho (Erasmus Arne Saknussemm)