
Autor: ISMAEL CONTRERAS CARMONA EDITORIAL NAZARÍ ISBN13: 9788494394713 Clasificación: Narrativa Tamaño: 14,522 cm Idioma de publicación: Castellano Edición: 1ª Ed.1ª Impr. Fecha de impresión: Abril 2015 Encuadernación: Rústica con solapa Páginas: 418 PVP: 17€ Colección: Thule Booktrailer.- https://www.youtube.com/watch?v=nuabB77zqUQ


Para los que me seguís sabeis que descubrí a Ismael Contreras hace algo más de un año con su saga El Legado de los dioses, una trilogía de ogros, moustruos, mitología, fantasía, dioses y brujos que me encantó, así que cuando descubrí que había escrito su cuarto libro, tenía que leerlo. Cuando lees la sinopsis (no dejes de leerla que es buenísima), o lo que es lo mismo el resumen del protagonista, ya te pica la curiosidad, y quieres leerlo, se nos advierte que estamos ante una historia oscura, sin esperanza, llena de sombras, rencor y odio, y es justo esto lo que encontramos y a mí me ha gustado. En sus primeras páginas ya te das cuenta que Ismael ha crecido como escritor, la historia es más adulta, más sentida y desde mi punto de vista mucho mejor escrita. Una historia negra, cruel, oscura, un protagonista atormentado rodeado de maldad, sus demonios y mucha sangre.
Una historia que te entreniene desde principio a fin, en la que una vez te das cuenta de que no hay esperanza y es lo que es, el camino y las aventuras te llevan al final esperado, en el que reina el odio, el rencor, los tiranos, la ambición.
Una historia en la que también existe el amor más puro, pero que un velo de odio y venganza lo ciega.
Una historia en la que los malos son malos, y los buenos son buenos, y aún así traicionan y matan. También estamos ante una novela del mismo género, en la que aparecen dragones, brujas y druídas, en las que ensalzan a unos dioses inexistentes y se culpa a la religión, al culto. En la que lo que vale es el poder y lo demás supervivencia, vamos que nada difiere de la realidad. Una historia en la que todos y cada uno de ellos y por regla general actúan en su propio beneficio y para saciar sus venganzas, sus anhelos, su codicia. He de dar la enhorabuena a Ismael porque he sentido esa desesperación, esa impotencia, y ese deseo. Me he dado cuenta del velo que ciega al protagonista, que aún sabiéndolo es más fuerte su odio, su sed de venganza que le alimenta día a día, a pesar de que le mata poco a poco, que el llevar una vida tranquila y de perdón. Si hay algo que no me ha gustado, ha sido el capítulo final, desde mi punto de vista sobra por completo. Estamos ante un libro de venganza, sangre, odio y rencor en el que por tanto no tiene cabida la reconciliación.
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