El Abuelo que Volvió para Salvar el Mundo es la continuación de El Abuelo que Saltó por la Ventana y se Largó.
Les contaré muy rápido de qué trata el primero para que entiendan de dónde parte el segundo y luego un resumen del segundo. ¿Todos de acuerdo? Adelante con ello.
En El Abuelo que Saltó por la Ventana y se Largó, conocemos a Allan Karlsson, un anciano que está a punto de cumplir 100 años y la gente del asilo donde vive le ha preparado un pastel. Cabe aclarar que Allan llegó al asilo luego de volar su casa en mis pedazos accidentalmente.
Pero, molesto con su situación, Allan decide largarse por la ventana, pantuflas puestas y todo. Y así, de embarca en toda una odisea, luego de robar accidentalmente a unos criminales de poca monta. La aventura de Alan concluye con él y su nuevo mejor amigo Julius, retirados en la playa.
Mientras tanto, El Abuelo que Volvió para Salvar el Mundo retoma las cosas dónde se quedaron, pero ahora, Alan y Julius se han quedado sin dinero, por lo que planean como escapar mientras celebran el cumpleaños número 101 de Alan.
Por azares del destino terminan siendo arrastrados dentro de un globo aerostático y recogidos por un carguero Norcoreano, el cual (obviamente) termina en Corea del Norte, de donde deberán escapar cuanto antes.
De ahí pasan por Nueva York, Suecia, conocen a Sabine (la vidente vendedora de ataúdes), se meten en problemas con la mafia rusa, escapan a Kenia y ahí detienen los malvados planes de cierto personaje que no mencionaremos.
Sé que suena a un pesimo resumen, pero la historia es tan enrredada que sería difícil contarla de otro modo y sin hacer spoilers.
Dicho todo esto, vayamos a la reseña como tal.
En los personaje no me detendré mucho, todos y cada uno de ellos están muy bien construidos, es claro quién habla y cuándo, las voces narrativas son por demás adecuadas, con la particularidad, de qué en la novela aparecer personajes importantes de la política internacional, por lo que se alcanza a ver, pareciera que Jonasson hizo su tarea de investigación.
En cuanto a la trama, y este es el punto que más me ha decepcionado; Jonas nos lo advierte: El Abuelo que Volvió para Salvar el Mundo regresó justo a eso, a funcionar como un rescate para el evidente declive que está percibiendo la sociedad, pero más allá de eso es evidente que la historia desde su concepción, sobraba. Allan Karlsson debió permanecer retirado y nunca encontrar su tableta negra.
Desde la primera parte la trama giraba al borde de la irreverencia y era fabuloso, esta vez… No tanto. Sin embargo, no es un mal libro, simplemente no fue lo que esperaba (y vaya que lo esperaba).
El mensaje político es poderoso, así como la crítica social, eso es lo mejor y más rescatable de toda la novela. No les voy a ha largo del mensaje, ustedes mismos tendrán que buscarlo, por favor, háganlo.
Pero bueno, esa es mi opinión. ¿A ti qué te ha parecido? ¿Qué otros libros me recomiendas?