Reseña: El Circo de la Noche, de Erin Morgenstern

Publicado el 17 febrero 2012 por Ali
¡Hola, trasnochadores!   Hoy, Noche de Palabras se tiñe de negro y blanco (o al menos esta reseña *3*) y algún toquecillo de rojo, pues por la ciudad de cierta persona ha pasado un circo maravilloso, llena de carpas espectaculares. ¿Que todavía no conocéis Le Cirque des Rêves? Quién sabe, a lo mejor una noche, mientras paseáis por las calles, os sorprenda la llegada inesperada de éste...
El circo llega sin avisar. No viene precedido de ningún anuncio, no se cuelga cartel alguno en los postes o vallas publicitarias del centro, ni tampoco aparecen notas ni menciones en los periódicos locales. Sencillamente está ahí, en un sitio en el que ayer no había nada. Abre sólo de noche y no es un circo cualquiera? Le Cirque des Rêves, pues ése es su nombre, es en realidad el escenario de una feroz competición: un terrible duelo entre dos jóvenes magos, Celia y Marco, entrenados desde pequeños para este propósito; un desafío que sus entrenadores llevan preparando desde hace años. Lo que no saben, y pronto descubrirán, es que éste es un juego mortal en el que sólo puede haber un vencedor. Un precio muy alto para dos jóvenes que acaban de descubrir el amor, un amor mágico y profundo que ilumina todo lo que tocan. Pero la partida debe continuar, y Marco y Celia sólo podrán confiar en el destino.

  Y ahí está. Ayer no lo viste, pero de repente ha aparecido. Es un circo de carpas blancas y negras, un circo peculiar, que abre al anochecer y cierra al amanecer. Nunca habías conocido algo así, y en unos días, se marchará, tal vez para siempre, sin permitirte investigar sobre él tanto como querías ni visitar todos sus rincones. No es un circo normal, con fieras entrenadas por pacientes domadores, o con payasos. No, Le Cirque Des Rêves no tiene nada que ver.
   Hector Bowen, más conocido como Próspero el Encantador, un famoso ilusionista de los de verdad, es sorprendido por su hija, de apenas 5 años, a la que no conocía, cuando su madre se suicida. Pero descubrirá que, al igual que él, Celia nos en una niña normal: posee un poder natural y mágico que muy pocos humanos pueden hacer.   Así es cómo comienza su entrenamiento; él enseña a su hija a controlar su poder, y a la vez hacerlo más y más fuerte y poderoso. Y por ello, pronto llega El hombre del traje gris, rival de próspero, que conseguirá convencer a Hector para que Celia se enfrente a un "reto" del que poco sabemos - una reto mortal entre dos magos, del que sólo uno saldrá vivo. Por ello, ese hombre tan misterioso recoge a Marco del orfanato, para entrenarle, ya que él será el rival de Celia.   la noveLos años pasan en la, un total de 30, y tanto Celia como Marco van creciendo, viviendo vidas completamente distinta, y aprendiendo cada vez más sobre la magia. Pero pronto sus vidas se cruzan, a pesar de que no sea por casualidad.   Es un circo lo que les une. Ese circo tan fantástico. Marco se convierte en el asistente de Chanderesh, dueño del circo, gracias a su instructo, mientras que Celia pasa a ser la ilusionista del circo, que ronda por todo el mundo. A pesar de las distancias (Marco vive en Londres, y Celia se dedica a recorrer todo el mundo), se encontrarán, y aunque llegue un momento en el que sean conscientes de que son contrincantes, el amor se antepondrá a todo.    Pero, recuerden señores: están atados a un reto indestructible, un reto que termina únicamente cuando uno de los dos muera.
Opinión personal (sin spoilers)
  He vivido en Le Cirque des Rêves - he sido acróbata, ilusionista y vendedora de ranas de chocolate. He viajado con sus personajes. He descubierto carpas maravillosas. Y, ante todo, me he enamorado de la historia.   Odio que se compare un libro con otro. En esta ocasión, Planeta habla de Erin Morgenstern diciendo que es una nueva "Tim Burton, J.K. Rowling y Lewis Carroll". Me parece genial que quieran atraer a un público más grande, pero eso sólo hace que las expectativas crezcan, y os puedo asegurar que no hace falta nada más que la historia para sumergir al lector en el mágico mundo de la autora. No es Harry Potter, ni Alicia en el país de las maravillas - es un universo totalmente nuevo y original que viene de la misma imaginación de Morgenstern, sin necesidad de ser comparada con nadie.
   Nos encontramos ante un estilo muy diferente a lo que estamos acostrumbrados los lectores de literatura juvenil. Ahora, solemos decantarnos por libros de mucha acción, diálogo dinámico e historias que fluyan a grandes velocidades. Este libro es diferente, y aunque al principio pueda hacerse algo pesado al no estar tan acostumbrados, luego consigue mostrarte una variante distinta de la literatura juvenil. Hay muchísimo detalle en la historia, con largas descripciones e intensos diálogos. No se hace lento, pero tampoco va a una velocidad vertiginosa, aunque uno lo debora en cuestión de días. ¿Y por qué? Porque la forma de escribir de Erin te atrapa. Consigue presentarte un lugar que nunca habías conocido de la manera más precisa.    Hablando también sobre el estilo, hay algo por lo que destaca El circo de la noche. No es una novela contada en un orden cronológico: vamos yendo y volviendo constantemente al pasado y al presente/futuro, como queramos verlo (en cada capítulo se nos dice el lugar y el año en el que se sitúa la historia), combinado con algunos capítuos sueltos escritos en segunda persona: tú eres el que visita el circo.    Puede confundir un poquito al principio; hay muchos cambios en el tiempo, pero el libro pronto te atrapa, y pronto le cojes el truco.
  Los personajes también me han gustado mucho. Parecerá extraño, pero los protagonistas no han sido mis favoritos en esta ocasión: aunque Celia y Marco están muy bien trabajados, al haber tal cantidad de personajes secundarios, es inevitable cogerle cariño a alguno de ellos, aunque sigo pensando que su amor es realmente bonito. En el circo trabaja mucha gente, gente especial, como los gemelos Murray, nacidos en ese mismo lugar; Poppet, la chica, y Widget, el chico, dos personas con poderes también increíbles que dan mucho juego a la historia. Ellos sí que me han encantado, al igual que Tsukiko, la contorsionista, que enseña tanto a Celia como al lector.
  Y también están los escenarios, increíbles como ninguno. El circo está compuesto por "grupos de carpas que parecen pirámides, algunas grandes y otras bastante pequeñas. Las carpas están unidas por senderos circulares y rodeadas por una valla circular. Como un buclé infinito" (palabras textuales del mayor revêur, o soñador, que amaba al circo, además de haberle aportado algo muy importante...) Cada y una de estas carpas esconde distintos espectáculos, secretos y paisajes de ensueño: podemos encontrarnos con espectáculos de ilusionismo, hasta jardines de hielo, pasando por salas de espejos mágicos.
  Es un libro autoconclusivo (¡aleluya!), aunque en el encuentro bloguero que se llevó ayer a cabo en Madrid -sí, sí, pronto crónica- rogamos a la autora que hiciese almenos una precuela (para saber un poco sobre el pasado). Aunque no esté trabajando en ella, le pareció una buena idea.   Va a ser un libro que va a dar mucho que hablar, de eso no tengo ninguna duda. El final es también impresionante, y deja al lector alucinado. Incluso los más deductivos no se pueden imaginar esto, os lo aseguro.
  Lo único malo que le he visto al libro ha sido una parte de la traducción: he encontrado varios laismos, y algún que otro error (pero muy, muy pocos), aunque todo lo demás está bien.
Nota final:
El circo de la noche
Erin Morgenstern
Planeta Internacional
Gracias a la editorial por el envío (¡y esa preciosa carpa!)