Título: El Final del Ave Fénix Autor: Marta Querol Editorial: B de Bolsillo Nº de Páginas: 528 ISBN: 978-84-9872-716-6
Cuando quise leer a un autor con apellido cuya inicial empezase por la letra Q, no dudé ni un momento, que iba a ser Marta Querol y su novela El Final del Ave Fénix. Y, la verdad, que la decisión no pudo ser más acertada, ya que es un libro que me ha encantado de principio a fin. Esta novela quedó entre los 10 finalistas del Premio Planeta de 2007, año en el que dicho Premio fue para Juanjo Millás y su novela El Mundo, quedando en segundo lugar Boris Izaguirre y su Villa Diamante. Evidentemente, tuvo más repercusión el finalista, debido a la fama televisiva que le precede a su autor. Sinceramente, ni me acordaba de quién había sido el galardonado aquel año, ya que no suelo leer el afamado Premio, que todo sea dicho de paso, no me parece transparente y creíble el hecho de que el jurado conceda el galardón a ciegas y sin saber quién es el verdadero autor del manuscrito. Vamos, que no se lo cree nadie. Desconozco completamente cómo serían las novelas ganadoras, pero supongo que no tendrían nada que envidiar a El Final del Ave Fénix, pero claro, su autora es una desconocida y eso no vende. Esta novela fue editada en 2012 y recuerdo que el año pasado tuvo mucho éxito entre los blogueros. Por eso, no dudaré en leer su segunda parte, Las guerras de Elena. Os paso a contar:
MARTA QUEROL, LA AUTORA:
Nacida y criada en Valencia, estudia Ciencias Económicas y Empresariales. El Final del Ave Fénix es su primera novela y llega a quedar entre las 10 finalistas del Premio Planeta de Novela de 2007. Cuando es publicada en formato digital, se convierte en el Best-Seller. Fue columnista del periódico Las Provincias y actualmente colabora en diversos medios de comunicación.ARGUMENTO:
La historia desde 1934 hasta nuestros días de dos familias, los Lamarc y los Company, cobra vida en El Final del Ave Fénix. Cuando en España comenzaba a presentirse la Guerra Civil, en cada una de estas familias, verán la luz dos niños, Elena y Carlos, cuyas vidas estarán predestinadas a cruzarse. Irán creciendo en dos mundos paralelos, sin conocer ninguno de ellos el afecto de una familia al uso. Elena, como la hija mayor de un matrimonio frívolo y de clase alta, que la acepta como una más de sus posesiones materiales; y Carlos como el pequeño de una familia modesta, dividida por la tragedia, y que aprende a sobrevivir en las calles durante la guerra. En un mundo en que nada es lo que parece, plagado de intrigas, lujos, miserias y de situaciones límite, irán creciendo hasta que en la edad adulta, unidos en una tormentosa relación en la que los negocios se mezclan con la pasión, se tendrán que enfrentar con sus propios fantasmas. A partir de los últimos instantes de la vida de su madre, Lucía intentará recomponer, en un flashback, el complejo puzzle que fue su existencia y la de los seres que la rodearon. La novela muestra en diálogos rápidos y de gran realismo, las entrañas y convencionalismos imperantes en la España del siglo XX, la lucha de la mujer por encontrar su lugar en la sociedad y nos sumerge por completo en unas vidas que el lector llegará a hacer suyas.
IMPRESIONES:
El comienzo de El Final del Ave Fénixes uno de los mejores principios que leí nunca en una novela. A modo de prólogo, a Elena, la protagonista, se le está acabando su vida. Recuerdo que lo leí en una sala de espera y se me llenaron los ojos de lágrimas. Su hija está contando cómo fue el proceso de su enfermedad y cómo poco a poco la esperanza de su recuperación quedaba en nada. A continuación la narración nos lleva a la Valencia de 1934, asistiendo al nacimiento de 2 niños: Elena Lamarc y Carlos Company. Ambos pertenecen a distinta clase social, pero sus destinos se unirán con el tiempo. Elena crece en una familia de la alta sociedad valenciana y aunque su vida está llena de lujos y comodidades, sus padres no le darán nunca el cariño que necesita. Carlos, por su parte, pasa su infancia alejado de su familia y prácticamente se cría en la calle con otros niños.
Junto a Elena Lamarc, conoceremos a sus padres: su madre Dolores (Lolo), frívola y egoísta y su padre (Gerard), infiel por naturaleza. También están su hermano (Gerard) algo más desdibujado; su marido (Carlos) y otros secundarios como Javier, su amor de juventud (que para mi gusto le podía haber sacado más partido a sus historia) o Clara, la chica de servicio con la que Elena mantiene más relación que con su propia madre.
Todos los personajes están perfectamente retratados. Algunas veces me daban ganas de zarandear a alguno de ellos, al ver tanta maldad e injusticia.
También la novela habla de algunos hechos históricos de la época como las inundaciones de Valencia de finales de los 50 (con las que Elena lo pasará fatal) o la famosa Talidomida, aquella pastilla que evitaba nauseas en las embarazadas, pero que provocó nacimientos de niños con serias malformaciones.
CONCLUSION: Las historias de familias son las que más gustan entre el público y de verdad, que me uno al club. El Final del Ave Fénix es, sobre todo, la historia de una familia con sus más y sus menos. Es una novela de personajes y también es el retrato de una sociedad anclada en el pasado donde lo más importante era “el qué dirán”. De verdad, que lo recomiendo sin dudar, ya que además se lee de un tirón. En parte me dio pena que se acabara, ya que me había encariñado enormemente con esa familia, así que leeré, sin duda, Las Guerras de Elena. MUY RECOMENDABLE.