“El hipnotista” es una novela de intriga ideada por dos escritores suecos que trabajan juntos bajo el seudónimo de Lars Kepler. Es la primera de una serie, en principio de ocho libros independientes, y que tendrán como protagonista al comisario de la policía judicial Joona Linna. Se publicó en 2009 y en Suecia causó gran expectación y un éxito en ventas.Es una novela en la que se nos plantean dos casos que el comisario deberá resolver. En primer lugar el asesinato de una familia, quedando un superviviente, el hijo de 15 años llamado Josef. El comisario solicitará la ayuda de Erik María Bark, un médico que realizaba sesiones de hipnotismo pero que ya no practica el hipnotismo desde hace unos diez años, y el comisario le pide que haga una excepción para intentar resolver el caso.
Y por otro lado unos días más tarde de que ocurra el primer hecho, desaparece misteriosamente el hijo del médico sin dejar pistas, sus padres piensan que ha sido secuestrado, solicitaran la ayuda del comisario y también del abuelo del niño desaparecido, que casualmente también es policía aunque ya está jubilado. El médico deberá bucear en su pasado si quiere recuperar a su hijo.El libro comienza muy bien, y todo hace pensar que la acción y la intriga serán una parte importante pero a pesar de que la intriga se mantiene más o menos, con la inclusión en medio del libro de un retorno al pasado de unas cien páginas, cortan demasiado la continuidad de la trama y eso provoca que se pierda el interés y por ende el deseo de continuar leyendo. Y esto hizo que me atascara en la lectura.Además en dos ocasiones deja dos capítulos colgados y el desenlace de uno de ellos es después de cien páginas con lo que durante ese tiempo estás más pendiente de cuando continuará esa parte que de lo que realmente está sucediendo.Y un par de detalles más que no desvelaré para no fastidiar la trama pero que chirrían bastante y el que lo haya leído o lo lea se dará cuenta. Todo esto hace que en conjunto sea una historia que no me animaría a recomendar, si como a mí todos estos pequeños detalles te impiden disfrutar de la lectura.Los diferentes capítulos van marcados por el día y la hora o momento del día, por lo que a veces no van en orden, ello también es debido a que cada capítulo corresponde a un personaje y éstos se van alternando.Lo mejor del libro es el desenlace final, que está bien trabajado, sin prisas y sin dejar cabos sueltos.Una historia que mantiene la intriga, al menos en ciertos momentos, con descripciones bien detalladas de la escena del crimen pero que no termina de convencer.“El hipnotista” desaprovecha una idea original y un buen comienzo pero que en sus sucesivas páginas no llega a cuajar y no supo captar mi interés.