“En un templo de Chiang Mai”, nos encontramos ante una novela que explora los sentimientos. Esta novela auto publicada ha sido escrita por la autora española Paloma Caraballo, a la cuál agradezco el envío de la novela. La novela narra la historia de Marc, un melancólico instructor de artes marciales de 35 años, y una niña de 11 años, Carlota, durante un viaje por Tailandia. Marc, está en un punto crítico de su vida, en la que a pesar de todo lo que le rodea se siente solo. La relación con su pareja es cada vez más fría y distante y los intereses comunes que una vez lo unieron con su socio han desaparecido, ya que ambos han cambiado y no desean lo mismo. Si ya de por si esto no fuera poco una nueva alumna por la que se siente atraído, hará que se replantee su vida y aquello que espera de ella. Una llamada inesperada pondrá en su vida a Carlota, una niña de 11 años que ha aprendido de la manera más dura que nada es permanente. Ambos decidirán hacer un viaje que sin duda les cambiará la vida.
Cada uno de los personajes relevantes de esta novela, de un modo u otro están solos, teniendo que enfrentarse a determinados problemas, todos ellos diferentes pero idénticos en los resultados, la soledad, la pena, la tristeza y la imposibilidad de ver una salida. Son unos personajes con los que de algún modo nos podemos sentir identificados, ya que sus problemas son cotidianos, pero que a pesar de ello siguen sin ser de fácil solución, impidiéndonos avanzar. Sin duda ellos son el punto fuerte de esta historia, unas vidas destrozadas, unidas por unos hilos débiles pero que a fuerza de cariño, respeto y devoción pueden ir reforzándose hasta convertirse en lazos irrompibles. Es sin duda un viaje a los sentimientos y al amor en sus diferentes vertientes, que se generan entre las personas.Una parte esencial de toda la historia es la filosofía que en ella se plasma; las ideas budistas, así como la vida de Siddhartha, el iluminado, se irán dejando sentir a lo largo de la novela, casi como si nos introdujeran en este modo de vida. Me he encontrado en ocasiones un tanto saturada con todas estas ideas, pero por supuesto es algo personal, ya que para mí es de difícil comprensión, con las que en ocasiones ni siquiera estaba de acuerdo, lo que me ralentizó, en cierto modo, el seguimiento de la historia, hasta cierto punto ágil.
Hay situaciones en la vida que se escapan a nuestro control, pero que tenemos que ser fuertes y luchar contra esa tristeza que se apodera de nosotros y no nos deja actuar. Aceptar la vida tal cual viene, con sus cosas buenas y malas, las dos realidades de nuestra existencia y siempre actuando correctamente. Nuestros personajes tendrán que llegar a esta idea para poder disfrutar de lo que tienen, aunque para ello tengan que aislarse en un templo de Chiang Mai, para así seguir caminando en la vida con ilusión. Una novela llena de sentimientos, y filosofía budista que te tiene en cierto modo intrigado de si conseguirán el equilibrio o no y de cómo llegarán a él. Una novela que puede haceros pasar un momento entretenido. Hasta la próxima historia que nos haga soñar, mis queridos lectómanos.