"Mi madre fue la última en dejar el apartamento. Cerró la puerta principal con firmeza. Nadie dijo una palabra mientras bajábamos las escaleras que conducían hasta la calle. Tras bajar, el oficial nos dijo que esperásemos en la entrada. Era una hermosa mañana, brillaba el sol y la plaza estaba desierta, salvo por los camiones que aguardaban para llevarnos hasta la estación."
Título: HettyAutor: Hetty VerolmeLugar de publicación: La CoruñaEditorial: AlmuzaraAño: 2013Páginas: 252
Personajes: Hetty, Max, Jacky, LubaTemática: realismo, infancia, Holocausto judío, nazis, hambre, enfermedadLocalización espacio-temporal: Belsen (Alemania), 1942
Resumen oficial:
1943, Amsterdam. Hetty Verolme solo tiene doce años cuando los nazis la deportan, junto con su familia, al campo de concentración de Bergen-Belsen, el mismo donde falleció Ana Frank. Pero Hetty no pierde el ánimo, y se erige en todo un símbolo para los niños del campo, recordándoles que la vida, incluso en medio del horror, sigue siendo bella.
Una sorprendente y extraordinaria historia real: la de la lucha por la supervivencia de un grupo de niños en un campo de concentración nazi durante la Segunda Guerra Mundial. Esta narración autobiográfica protagonizada por Hetty Verolme, una heroína adolescente, revela cómo ella y sus hermanos superaron toda suerte de adversidades tras ser separados de sus padres y confinados en la Casa de los Niños, en Belsen, Alemania. Un documento que aborda una vertiente desconocida del Holocausto, esta conmovedora obra refleja la tenacidad y el espíritu invencible de la infancia.
Mi opinión:
Ella cuidaba y protegía a sus dos hermanos menores y además de un buen grupo de niños que estaban solos en se lugar, el barracón nº211, y nos narra el riesgo que corría cuando tenía que salir a buscar comida para todos, con unos salamis escondidos dentro de los pantalones y a riesgo de ser atacada por los guardias nazis, o robada por los otros prisioneros. Durante muchos días nadie se ocupó de la Casa de los Niños en ese campo, así que para buscar comida tenían que recorrer mucho camino dentro del campo de concentración, ya que estaban muy alejados de las cocinas, que siempre estaban custodiadas por nazis.
Por suerte para ella, una mujer polaca llamada Luba se ocupará de que a los niños no les falte algo de comida, que en ese tiempo era un simple pedazo de pan al día, con algo de agua. En ocasiones, podían conseguir algo extra como azúcar, de la cual tomaban una cucharada por las noches para seguir viviendo y tener algo de energía, siendo muchas veces ese su único alimento.
Nuestra protagonista, que vivió en sus carnes todo esto, pues es una novela realista y además autobiográfica, fue una luchadora nata en su infancia y adolescencia. Nos relata sus vivencias con pasión, mostrándonos lo que se puede hacer con un poco de esperanza y cuando uno no se rinde a pesar de las adversidades. Una familia separada por las circunstancias que tendrá que hacer frente a muchas penurias en todos los ámbitos por el mero hecho de ser judío en el 1940-45.
El libro está muy bien narrado, con un lenguaje muy simple y directo y se termina de una sola vez, pues te integra tanto en la historia que no lo puedes dejar de leer hasta ver como termina todo. El libro viene ilustrado con fotografías reales del campo de concentración y los niños que vivieron en primera persona toda la historia.
Puntuación: